Un proyecto para rebajar, gradualmente, la jornada laboral de 45 a 38 horas semanales en el país y permitir a los trabajadores poder pactar con sus empleadores un régimen de 4 días trabajados y 3 de descanso, fue el que presentó este jueves un grupo de diputados de oposición encabezados por Raúl Soto (independiente).
En el texto del proyecto se recordó que la reforma laboral impulsada por el Gobierno en 2019 contempló la posibilidad de pactar jornadas semanales de 4 x 3, sin embargo, "dicha reforma no se hizo cargo de las horas semanales a distribuir. En efecto, distribuir 45 horas en 4 días puede llegar a generar efectos contraproducentes", señaló.
Por eso, indica la iniciativa impulsada además por los diputados
Rodrigo González (PPD), Gastón Saavedra (PS), Tucapel Jiménez (PPD]), Andrea Parra (PPD) y Alejandra Sepúlveda (FRVS), "la extensión y distribución de nuestra jornada laboral no colaboran con el objetivo de mejorar los tiempos de descanso y su calidad".
Y añadió que "el actual sistema de descansos del trabajo el abiertamente insuficiente conforme a la evolución de las necesidades de cuidado de la salud mental y a la demanda de corresponsabilidad que la sociedad moderna acepta como necesaria para lograr mejores estándares de bienestar".
Así, la moción tiene como objetivo "reducir la extensión de la jornada semanal y ampliar el abanico de posibilidades para su distribución, de tal forma que el trabajador pueda optar por tener tres días de descanso concentrando la jornada semanal en cuatro días, ello sin vulnerar los límites generales de jornada diaria derivados de los criterios de salud ocupacional".
Para lograr tales propósitos, se propone rebajar la jornada semanal a 38 horas y sea posible pactar esta jornada laboral en 4 días. Con todo, apunta a que, para facilitar la adaptación de las empresas, empleadores y trabajadores a este máximo semanal, "se ha diseñado un mecanismo escalonado progresivo que comienza aplicando una disminución de la jornada semanal a 40 horas, desde el inicio del año calendario inmediatamente siguiente al que esta ley se publique en el Diario Oficial. Luego de 5 años contados desde dicha publicación, se producirá la rebaja final a 38 horas semanales", dice la moción.
Además, de acuerdo con el proyecto, en el evento en que la jornada semanal sea distribuida en 4 días, "la jornada diaria deberá ser interrumpida para la colación del trabajador por al menos una hora imputable a la jornada. Asimismo, las partes no podrán pactar la realización de horas extraordinarias".
Asimismo, añade, "esta distribución de jornada no podrá significar, bajo ningún concepto, una disminución en la remuneración del trabajador, ni tampoco alguna afectación a los derechos individuales y colectivos del trabajador", agregando que "en caso de que la distribución de la jornada semanal se acuerde en estos términos, los días de descanso deberán ser, obligatoriamente, continuos y entre ellos se deberán comprender los días sábado y domingo".
"Serán titulares de este derecho todos los trabajadores y trabajadores que presten sus servicios, al menos, durante 4 días en una misma semana", señala la iniciativa.
Según expuso el diputado Soto, "creemos que hay que avanzar y es el momento en Chile de abrir un debate respecto de la posibilidad de tener una jornada laboral 4 x 3. Es decir, que se les permita a los chilenos y chilenas trabajar cuatro días continuos, y descansar tres días seguidos".
Esta propuesta, sostuvo el parlamentario, "va a reimpulsar el debate de las jornadas laborales, lamentando por cierto que en el Senado esté congelado y durmiendo el proyecto de 40 horas, (pero) este proyecto pretende ir un poco más allá, llegando al quinto año a las 38 horas, pero incorporando además la posibilidad que esas 40 o 38 horas, según el año, se distribuyan en 4 días, 5 días o 6 días. Hoy día solamente se puede hacer en cinco o seis días".
"Este proyecto abrirá otras perspectivas de desarrollo en los tres días de descanso del trabajador, como por ejemplo el turismo, la gastronomía. Es decir, va a producir un efecto positivo en la economía global del país".
Gastón Saavedra
"Creemos que es una posibilidad que va a ser muy atractiva hoy día para los trabajadores y trabajadoras y lo hemos trabajado con el presidente de la comisión de Trabajo, Tucapel Jiménez, quien tiene toda la voluntad y disposición de poner este proyecto en tabla y reabrir el debate en materia de jornada laboral en Chile", concluyó.
Por su parte, el diputado Tucapel Jiménez señaló que "un proyecto de estas características lo que busca es mejorar la salud mental, el tiempo familiar. Sin embargo, en ningún caso buscamos bajar la productividad o una reducción de salario. Por el contrario, planteamos una gradualidad en su implementación para que la economía no se resienta y se vaya adaptando a este tipo de cambio".
A su vez, el diputado Gastón Saavedra planteó que la iniciativa "hará que exista un mayor compromiso de los trabajadores con los objetivos empresariales y esperamos que estimule a los empresarios a tener un mayor compromiso con sus trabajadores, para que existan relaciones laborales de colaboración y de respeto entre trabajador y empresario".
"Además, este proyecto abrirá otras perspectivas de desarrollo en los tres días de descanso del trabajador, como por ejemplo el turismo, la gastronomía. Es decir, va a producir un efecto positivo en la economía global del país", cerró.
