La secretaria del Tesoro estadounidense, Janet Yellen, instó este lunes a todos los países de la Unión Europea (UE) a que respalden el mecanismo sobre fiscalidad para multinacionales que el sábado apoyó el G20.
Asimismo, llamó a que el bloque comunitario mantenga las medidas de apoyo a la economía durante 2022 y a que los Estados miembros consideren otras nuevas en el futuro.
Yellen se pronunció en ese sentido durante un debate hoy en Bruselas con los ministros de Economía y Finanzas de la eurozona (Eurogrupo) y del resto del club comunitario.
{RELCIONADAS https://www.emol.com/noticias/Economia/2021/07/09/1026284/impuesto-global-minimo-multinacionales-g20.html; https://www.emol.com/noticias/Economia/2021/06/08/1023195/impuestos-g7-grandes-empresas.html}
"Esperamos que todos los Estados miembros de la UE se unan al consenso y que la Unión Europea avance en esta cuestión al nivel de la UE", afirmó en la reunión, tras referirse de manera explícita al segundo pilar del pacto fiscal global, que aboga por imponer un tipo mínimo del impuesto de sociedades de al menos el 15% a las empresas con una facturación de al menos 750 millones de euros.
Según la declaración que publicó el Departamento del Tesoro, Yellen subrayó que se necesitan "fuentes de ingresos sostenibles que no dependan de gravar aún más los salarios de los trabajadores y exacerbar las disparidades económicas que todos estamos comprometidos a reducir".
"Necesitamos poner fin a que las corporaciones transfieran ingresos de capital a jurisdicciones de impuestos bajos y a que recurran a trucos contables que les permitan evitar pagar su parte justa" de impuestos, dijo.
Aseguró que la carrera "a la baja" en el ámbito del impuesto de sociedades "debe terminar".
"Trabajando juntos, podemos asegurarnos de que así sea", constató.
El 1 de julio, 130 países y jurisdicciones de los 139 que forman parte del llamado marco inclusivo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) se sumaron a un acuerdo que abre la puerta a una nueva fiscalidad de las multinacionales.
Entre los países que no se han sumado figuran Estados miembros de la UE, como Irlanda, Estonia o Hungría.
Este último sábado, los ministros de Finanzas y gobernadores de los Bancos Centrales del G20 respaldaron ese pacto durante una reunión celebrada en Venecia (norte de Italia).
El sistema fiscal se sustenta en dos pilares; el primero concierne a todas las compañías con una facturación mundial superior a los 20.000 millones de euros y con una rentabilidad (relación entre beneficios e ingresos) superior al 10 %.
El segundo pilar es el impuesto de sociedades de al menos el 15%.
En paralelo, la Comisión Europea preparaba un impuesto comunitario sobre las grandes empresas digitales que funcione como recurso propio para financiar el presupuesto de la UE.
Estados Unidos desconfiaba de esa iniciativa y Bruselas anunció hoy que la deja en suspenso para concentrarse en las labores técnicas que aún se deben realizar para poder implementar el acuerdo de la OCDE respaldado por el G20. Se espera que ese trabajo técnico termine en octubre.
Por otra parte, Yellen subrayó este lunes que la respuesta fiscal de la UE y sus Estados miembros a la crisis del covid-19 fue "decisiva y sin precedentes" y que el Banco Central Europeo (BCE) reaccionó "rápido y con fuerza" y logró contener los diferenciales de la deuda soberana (la prima de riesgo) y mantener condiciones financieras favorables.
Señaló, no obstante, que en un contexto en el que "la incertidumbre sigue siendo alta", es "importante" que la política fiscal proporcione apoyo durante 2022 y que, en adelante, los Estados "consideren seriamente medidas fiscales adicionales para asegurar una recuperación robusta" y "duradera".
Consideró que una parte fundamental de esa recuperación es crear un marco fiscal para la UE "con suficiente flexibilidad para permitir a los países responder con fuerza a crisis e invertir" frente a la crisis climática y en áreas que impulsen el crecimiento.
Especificó, sin embargo, que "proporcionar continuado apoyo fiscal para el rescate de nuestras economías e invertir en una recuperación inclusiva no significa abandonar la precaución".
"La sostenibilidad fiscal a largo plazo tiene una importancia crítica", dijo Yellen.
También instó a que la UE y Estados Unidos trabajen juntos para contener "las amenazas a los principios de apertura, competencia justa, transparencia y rendición de cuentas".
Se refirió a "las prácticas económicas injustas, la conducta maligna y el abuso de los derechos humanos por parte de China", los "abusos" del régimen bielorruso o el "comportamiento maligno continuo y creciente de Rusia".