Pese a que la paulatina normalización de los factores que presionaron los costos ha permitido que la inflación se reduzca, transitando desde el peak de 14,1% anual que tocó en agosto de 2022 a una variación de 8,7% a mayo de este año, las expectativas de que la economía chilena crezca este año se acotaron. Así lo expuso el Banco Central en su segundo Informe de Política Monetaria (IPoM) del año.
En el documento, la entidad presidida por Rosanna Costa considera que los precios continuarán bajando y su convergencia a la meta de 3% tendrá lugar en la segunda mitad de este año.
De hecho, el banco ahora espera que el IPC se ubique en 4,2% hacia diciembre, lo que contrasta levemente con el 4,6% previsto en el informe anterior.
Por otro lado, el BC ratificó el pronóstico de que el Producto Interno Bruto (PIB) podría registrar una contracción de 0,5% en 2023 -al igual que en el IPoM de marzo-, pero al mismo tiempo redujo la probabilidad de un alza a 0,25% versus el 0,5% anterior.
Eso sí, para el ejercicio de 2024 mejoró las perspectivas de expansión de la actividad desde 1,0%-2,0% a 1,25%-2,25%, y para 2025 mantuvo el rango de 2,0% y 3,0%.
En relación a la inversión, medida como Formación Bruta de Capital Fijo (FBCF), el instituto emisor plantea que se "sigue incorporando un escenario externo complejo, con elevada incertidumbre y condiciones financieras que continuarán restrictivas". Así, para este año, el IPoM asumió una caída de 3,0%, similar al retroceso de 2,9% proyectado en marzo.
Urgen medidas pro inversión
Dado que este marco se cruza con los esfuerzos del Gobierno por alcanzar un pacto fiscal que permita revivir la reforma tributaria, es que expertos aseguran que el camino para el ministro de Hacienda, Mario Marcel, principal interlocutor en materia de impuestos, podría ponerse cuesta arriba, y que medidas pro inversión deben estar presentes en el debate.
Al ser consultada por el tema en una conferencia de prensa tras la presentación del IPoM, si bien Costa recalcó que la reforma tributaria "es un tema que le corresponde definir a los actores que están conversando sobre la materia", reparó en que "lo relevante es que la política fiscal se encamine hacia una trayectoria de sostenibilidad en el mediano plazo".
Sobre la materia,
Hermann González, coordinador macroeconómico de Clapes UC, menciona que "el informe es enfático en señalar que la inversión sigue débil, está estancada hace varios trimestres y mantiene la proyección de dos años consecutivos de caída (2023-2024), lo cual es muy negativo para la creación de empleos y para el crecimiento del PIB en el mediano y largo plazo".
"Ciertamente se hace más complejo impulsar una reforma tributaria en este contexto, aún incluyendo gradualidad en las alzas de impuestos", aseveró González, añadiendo que "no basta con despejar la incertidumbre a cualquier costo. Un buen pacto fiscal será uno que permita una recuperación vigorosa de la inversión y de la creación de empleos en los próximos años".
Por lo mismo, el economista advierte que "la discusión tributaria paraliza la inversión mientras se produce, porque las empresas esperan a tener mayor claridad sobre las reglas que imperarán en el futuro", y que, en ese caso, "un pacto tributario no debería incluir impuestos que afecten a la inversión, o frenen el desarrollo del mercado de capitales, en cambio debería incluir claros incentivos para atraer inversión, incluyendo, por ejemplo, un esquema de invariabilidad tributaria para grandes proyectos".
Por su parte, Patricio Jaramillo, director de Riesgo Financiero en Deloitte, sostuvo que un escenario de menor crecimiento, con una inversión contraída, podría hacer más cuesta arriba la tramitación de la reforma tributaria. "Está ese riesgo, y dependerá del balance que pueda plasmar el Ministerio de Hacienda entre buscar un esquema más redistributivo, sin afectar los incentivos al ahorro y la inversión", deslizó.
"No basta con despejar la incertidumbre a cualquier costo. Un buen pacto fiscal será uno que permita una recuperación vigorosa de la inversión y de la creación de empleos en los próximos años"
Hermann González, coordinador macroeconómico de Clapes UC
En lo central, Jaramillo expresó que "el panorama de crecimiento es más modesto para este año, con un cuarto trimestre con crecimiento bajo el potencial y el riesgo de un cierre de brechas mayor que el de marzo. Posteriormente, para 2024 y 2025 se desprende un crecimiento muy en torno al potencial (2%), por lo que la recaudación fiscal vía dinamismo de la actividad será acotada en este contexto.
Si la reforma termina siendo más contractiva aún, el propósito último de la reforma se puede ver comprometido".
En tanto, Sergio Lehmann, economista jefe de BCI, esgrime que "la reforma tributaria tiene como propósito financiar un mayor gasto social, pero se da en un contexto económico aún muy débil. Por ello, no será fácil avanzar, reconociendo, de cualquier manera, la necesidad de que el marco que se defina debe generar un mayor atractivo tributario para nuevos proyectos".
Desde su perspectiva, "sin duda se hace más difícil -el debate-, reconociendo que debe haber un foco potente en recuperar el crecimiento de largo plazo de la economía". "El pacto fiscal debe contemplar mayores incentivos para la inversión, mayor eficiencia del gasto público y mecanismos eficientes que permitan reducir la elusión y evasión", apuntó Lehmann.
"Si la reforma termina siendo más contractiva aún, el propósito último de la reforma se puede ver comprometido"
Patricio Jaramillo, Director de Riesgo Financiero en Deloitte
El decano de la Facultad de Economía y Gobierno de la Universidad San Sebastián,
Alejandro Weber, fue más tajante, recalcando que "el IPoM del Banco Central nos deja una buena y una mala noticia. La buena es que baja la proyección de inflación para este año de 4,6% a 4,2%. La mala noticia es que cae la proyección de crecimiento a un máximo de 0,25%, eso es muy poquito, y significa que el empleo se va a ver afectado y que los salarios reales de la población también van a caer".
"Por otro lado, cae la inversión y cae muy fuertemente el consumo.¿Qué significa esto? Que no es momento para subir impuestos, todo lo contrario. Lo que tiene que hacer el Gobierno es reimpulsar la economía con incentivos a la inversión y a la creación de empleos formales", añadió Weber.