Desde el 1 de abril está habilitado el proceso de Operación Renta 2024, que se extiende hasta el 10 de mayo y en el que los contribuyentes deben declarar. Durante este lapso, es oportuno que los ciudadanos declaren sus ingresos del año fiscal 2023 para evitar posibles observaciones y multas del Servicio de Impuestos Internos (SII).
Diego Plaza, analista financiero tributario de Maxxa, fintech especializada en servicios financieros para pymes, señala que “existen errores básicos que carecen de sanciones por parte del SII, como los de digitación en el RUT o datos personales, en la información de retenciones y en los ingresos no afectos a impuestos. En tanto, hay equivocaciones que pueden generar multas que varían entre 1% y 50% del tributo no pagado o pagado de manera incorrecta, según la gravedad y la reincidencia de la infracción, como por ejemplo, la subdeclaración de impuestos”.
¿Qué sucede si ya se cometieron errores en la declaración de impuestos?
Según Plaza, aún hay margen para corregirlos antes de que finalice el proceso. "La declaración de impuestos se puede enviar varias veces mientras esté en estado de espera antes de ser validada por el SII. Una vez validada, se convierte en definitiva", explica el analista.
Es esencial tener en cuenta las fechas clave en las que el SII procesa las declaraciones de renta: el 19 de abril para los formularios enviados entre el 1 y el 19 de abril, el 26 de abril para aquellos enviados entre el 20 y el 26 de abril, y el último plazo hasta el 10 de mayo para las presentadas desde el 27 de abril en adelante.
¿Qué sucede si no se corrigen los errores a tiempo?
Después de los plazos establecidos, el SII procesará la información y notificará observaciones sobre posibles errores detectados. Estas observaciones pueden ser subsanadas durante la primera quincena de junio durante el período de rectificaciones, pero es clave monitorear el proceso a través del sitio web del SII para evitar sanciones más severas, como multas o acciones penales.
Es esencial mencionar que el contribuyente arriesga a sanciones más severas si no subsana las observaciones, como multas por infracciones tributarias o acciones penales. “Para evitar esta situación, la principal solución es que las pymes cuenten con asesoría que les ayude a mantener su situación financiera y tributaria ordenada. Contratar a un contador y utilizar herramientas digitales que le permitan facilitar la gestión de sus finanzas pueden ser apoyos fundamentales al momento de enfrentar la declaración de impuestos”, concluye el analista financiero tributario de Maxxa.