El Banco Central publicó esta mañana el Informe de Política Monetaria (IPoM) de junio, en el que actualizó su diagnóstico y estimaciones para la economía chilena. En él, destacó que "las proyecciones de inflación total suben de manera importante, en particular durante 2025".
El ente emisor subraya que "en ello influye el impacto del shock de oferta asociado a precios de la electricidad más elevados y un mayor impulso de la demanda interna".
Y es que las tarifas de las cuentas de la luz subirán hasta un 30% a partir de julio. Mientras que 2025 las alzas llegarían hasta el 60%, según cálculos del Gobierno. Esto, debido a la puesta en marcha de la ley de estabilización de tarifas eléctricas que descongela los precios fijados desde 2019.
"La proyección considera que la inflación anual cerraría 2024 en 4,2% (3,8% en marzo). En 2025, culminaría en 3,6% (3,0% en marzo), con una inflación promedio que sería 1,1 pp mayor durante ese año. Su convergencia a 3% ocurrirá en la primera mitad de 2026", dice el informe. Así se posterga el retorno a la meta de inflación en Chile, según la estimación del ente emisor.
En relación al crecimiento, la entidad presidida por Rosanna Costa proyecta que para este año se espera que el PIB crezca entre 2,25 y 3,0%. Este rango mejora en relación al piso de 2% que la entidad había previsto en marzo.
Para 2025 y 2026 el rango proyectado se mantiene entre 1,5 y 2,5%.
"El ajuste en relación con el rango previo (2,0-3,0%) se asocia a mejores datos efectivos por el lado del gasto y los alcances iniciales del alza del precio del cobre. A mediano plazo, los efectos de este último elemento se compensan con el impacto negativo que tienen los reajustes de las tarifas de electricidad en el ingreso disponible de los hogares", señala el documento.
Otras proyecciones
El análisis del Banco Central indica que el precio del cobre promediará US$4,3 la libra entre 2024 y 2026. Esto, por sobre los US$3,85 supuesto en marzo.
"Se estima que más de la mitad del incremento que acumula dicho precio desde principios de este año se debería a factores más persistentes".
La escalada impactaría de manera positiva en la inversión, las expectativas de los agentes y el saldo de la cuenta corriente.
En relación a la inversión, la entidad actualizó su pronostico (medida como formación bruta de capital fijo), previendo que caerá 0,3% este año, frente a la baja de 2% pronosticada en el IPoM de marzo.
"Aunque persiste débil, la formación bruta de capital fijo (FBCF) detuvo el deterioro observado en la segunda mitad del año pasado. Al corregir por estacionalidad, la FBCF tuvo una variación trimestral nula en el primer trimestre, reflejo de un comportamiento más estable tanto en maquinaria y equipos como en construcción y obras", se indica en el IPoM.
Así, se detalla que "dentro de este último, el segmento de edificación se mantuvo más lento que el de obras de ingeniería, como corrobora información parcial del segundo trimestre. En todo caso, todos los componentes de la FBCF siguieron contrayéndose año a año".
Con respecto al precio del dólar, en tanto, el BC explica que desde el cierre estadístico de marzo, el peso se ha apreciado cerca de 5% frente a la moneda norteamericana y más de 6% en su medida multilateral (TCM). Así, el peso chileno ha tenido una evolución favorable, en comparación con otras monedas.
Por último, con respecto a la política monetaria, el ente emisor estima que la TPM seguirá reduciéndose durante el horizonte de política monetaria, a un ritmo que tomará en cuenta la evolución del escenario macroeconómico y sus implicancias para la trayectoria de la inflación.
Aunque, recalca que existen escenarios en los que podría seguir un camino distinto al de la estimación central.