El comercio en la comuna de Santiago se ha deteriorado desde el estallido y la pandemia. El desgaste no solo se constata al caminar por sus calles, sino que también al revisar los estudios que se han hecho en relación al sector.
En efecto, desde noviembre de 2019 hasta octubre de 2024, alrededor de 900 locales bajaron sus cortinas, según un análisis de la consultora inmobiliaria GPS Property. Esto ha llevado, según el mismo informe, a que exista casi un 20% de disponibilidad de comercios en la zona.
Entre quienes se mantienen el diagnóstico no es positivo. Una encuesta de la Cámara Nacional de Comercio (CNC) y la Asociación Gremial de Turismo y Comercio del Centro Histórico de Santiago (TUCHS), que se publicó en septiembre, ofreció alarmantes resultados. De los comerciantes consultados, un 79% señaló que los asaltos y robos a transeúntes ocurren con alta frecuencia; y un 70,8% dijo observar constantemente la presencia de bandas criminales.
En el mismo análisis, los comerciantes evaluaron a la autoridad comunal, con nota en escala de 1,0 a 7,0. La evaluación más baja se le otorgó a la reacción frente a un delito, con un 2,4 y un 40% de los encuestados calificando con un 1,0.
"Es una gran noticia"
La desazón por la que pasa el comercio en Santiago, producto de la inseguridad, se convirtió en uno de los puntos claves de la campaña que enfrentó a la actual alcaldesa, Irací Hassler (PC), con la carta de la oposición, Mario Desbordes (RN). El triunfo de este último, con más del 51% de las preferencias, es calificado como positivo por los gremios del comercio, que tienen altas expectativas ante el inicio de la nueva administración.
Para José Pakomio, presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), la victoria del exdiputado "es una gran noticia". "Esperamos que la gestión le dé un nuevo aire a Santiago, que sea un respiro, principalmente para sus vecinos, que son quienes lo habitan, para quienes trabajan en ella, para los comerciantes y para los turistas que la visitan", sostiene.
"Esperamos que la gestión le dé un nuevo aire a Santiago, que sea un respiro, principalmente para sus vecinos, que son quienes lo habitan, para quienes trabajan en ella, para los comerciantes y para los turistas que la visitan"
José Pakomio, presidente de la Cámara Nacional de Comercio
"Es una oportunidad única de que Santiago vuelva a ser lo que fue, que recuperemos nuestra capital para los chilenos y para los extranjeros y que vuelva a ser la ciudad dinámica y que ofrecía oportunidades, limpia, segura y ordenada", asegura también.
Pakomio no es el único en los gremios que ve la llegada de Desbordes con optimismo. Carlos Concha, presidente de la Asociación Gremial de Turismo y Comercio del Centro Histórico de Santiago (Tuchs) también tiene altas expectativas. "Desbordes, prometió que su primera prioridad será la seguridad y eso para nosotros es fundamental. La seguridad es el requisito mínimo para que se desarrolle la vida en sociedad y permita que crezca la actividad comercial y el turismo y se genere un círculo virtuoso", explica.
"A la actual edil le tocó administrar la postpandemia, donde hubo problemas muy graves. Y su foco, claramente, no fue la situación de nuestra industria", añade. Y agrega: "Los que permanecemos en el centro nos han tocado 5 años de crisis tras crisis lo que provocó que muchas empresas quebraran o se fueran del centro de Santiago".
Por último, dice esperar que la nueva administración se instale rápidamente, pues 4 años nos es mucho tiempo, "y los desafíos son enormes". "No podemos esperar mucho tiempo más para la reactivación económica", concluye.
En la Cámara de Comercio de Santiago (CCS) comparten el entusiasmo. "Somos optimistas respecto al programa presentado por el alcalde electo, especialmente en cuanto a control y erradicación del comercio ilegal, seguridad, mejoramiento de barrios comerciales y apoyo al emprendimiento y comercio local", comenta la presidenta de la entidad, María Teresa Vial.
La abogada, y también primera mujer en presidir la entidad, sostiene asimismo que "en la comuna de Santiago es clave recuperar los más de 800 comercios que se perdieron tras la crisis de 2019 y la pandemia y darle mayor seguridad a los locatarios para poder desplazarse con seguridad en sus barrios". "Urge -añade- recuperar el uso de los espacios públicos y lograr que Santiago vuelva a ser la comuna que más población flotante recibe día a día".
En la Asociación Chilena de Gastronomía (Achiga) las expectativas son similares. Su presidente, Máximo Picallo, dice que la mayor esperanza que tiene la industria en relación al cambio de autoridad es que "los turistas vuelvan al centro y que los chilenos también vayan al centro, ojalá con actividad de ocio en la noche también".
Mientras, desde la Multigremial Nacional, Juan Pablo Swett señala que "las pymes y los emprendedores de Santiago necesitan acciones concretas". Con eso en cuenta, explica que "la exalcaldesa Hassler comenzó su administración entregando más de 1.000 permisos al comercio ambulante, lo que fue una pésima señal para las pymes. En ese sentido, hoy Mario Desbordes debe marcar una diferencia e implementar medidas que fortalezcan la formalización y la búsqueda de espacios seguros para volver a emprender y trabajar en paz".
