Los principales gremios empresariales valoraron la apertura del ministro de Hacienda, Mario Marcel, quien no descartó discutir la posibilidad de reducir el impuesto corporativo del 27% al 23%, una propuesta que surgió desde el mundo privado y que es más ambiciosa supera el 25% que puso sobre la mesa el Gobierno.
"No lo descarto de plano, pero nuevamente tenemos que resolver el tema de la compensación fiscal. Y en esto hay que evitar el 'wishful thinking'(pensamiento ilusorio), porque es muy común que se diga 'no, es que si bajamos impuestos la economía va a crecer tanto que la recaudación que va a generar eso va a compensar'. La curva del Laffer ha sido desmentida por innumerables análisis y experiencias", sostuvo Marcel en el marco del seminario "Visión económica 2024, cómo crecer al 4%: del diagnóstico a la acción"
Susana Jiménez, presidenta de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), calificó como positiva la apertura del ministro.
"Es una buena noticia que el ministro esté disponible a bajar el impuesto corporativo de 27% a 23%. Ese es el promedio de la OCDE, donde incluso los países más exitosos económicamente tienen menos de 23% y, en muchos casos, gozan de otras condiciones habilitantes que los hacen aún más atractivos a la inversión", ,manifestó.
Jiménez subrayó que la competitividad fiscal es crucial para atraer capitales. "Los capitales compiten y eligen los lugares más beneficiosos para instalarse, por lo tanto, es necesario que, al menos, nos acerquemos al promedio de las naciones a las que quisiéramos parecernos. Para compensar fiscalmente esta reducción, el primer camino es la mayor recaudación que traerá consigo el mayor crecimiento económico gracias a las mayores inversiones que se concretarían con tasas más competitivas, añadió.
La líder gremial también sugirió alternativas para la compensación fiscal, como "mejorar la eficiencia del gasto público, reforzar el combate a la informalidad y la evasión tributaria" y la aplicación de un impuesto a la primera repartición de dividendos, asegurando que "nadie termine pagando más de lo que paga con la estructura actual".
En tanto, Rosario Navarro, presidenta de la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa), también valoró el enfoque del ministro, señalando que "se está orientando en un buen sentido la discusión".
Y agregó que la meta de reducir el impuesto corporativo al promedio de la OCDE, del 23%, "es algo que ya estamos en discusión, obviamente todavía falta para llegar a ese número".
Navarro destacó la necesidad de mantener la competitividad fiscal. "El impuesto total al capital de un 35%, que es lo que paga un inversionista extranjero, debe ajustarse. Claramente tenemos todavía mesas técnicas que vamos a seguir aportando desde este conocimiento técnico y experto para que logremos llegar a un consenso", añadió.
Mientras que José Pakomio, presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), recordó los acuerdos previos del pacto fiscal.
"Según habíamos entendido cuando se negoció el pacto fiscal lo acordado por todos los actores fue no subir el impuesto global complementario, bajar el impuesto de primera categoría, aumentar impuestos por ganancias de capital y aplicar impuestos a los dividendos. Con estas dos últimas medidas, se logra compensar una baja en el impuesto corporativo", aseveró.
Pakomio enfatizó la importancia de la competitividad fiscal para atraer inversiones en un contexto de globalización.
"Es clave que el impuesto de primera categoría se sitúe en tasas similares a países de la OCDE. Cada punto de crecimiento del PIB representa cerca de US$600 millones de ingreso fiscal según informe elaborado por economistas con motivo del pacto fiscal", cerró.
Por último, Antonio Walker, presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), destacó el carácter constructivo de las conversaciones.
"Nos alegramos muchísimo como Sociedad Nacional de Agricultura que se esté produciendo este diálogo con el ministro Hacienda, diálogo respetuoso, diálogo técnico donde cada uno hace ver sus puntos de vista porque eso enriquece la propuesta", dijo Walker.
El líder de la SNA calificó como clave la propuesta de reducir el impuesto al 23% para reactivar la inversión. "Es un impuesto que está muy por sobre los países OCDE y hay que ser muy creativo en cuál es la fórmula para contrarrestar esta baja que no afecte a los pequeños, a los medianos y a las personas", finalizó.