Fueron 40 los senadores que aprobaron este lunes por la noche, cerca de la medianoche, el proyecto de ley presentado por el Gobierno de Gabriel Boric que reforma el actual sistema de pensiones.
Tan solo fueron siete los legisladores que rechazaron la iniciativa, lo que habla de un acuerdo transversal que alcanzaron los legisladores de la Cámara Alta.
Y es precisamente ese punto el que valoraron los parlamentarios una vez terminada la cerca de nueve horas que duró el debate del proyecto en la sala del Senado.
"Esta reforma previsional es particularmente importante. Se hace cargo de los principales desafíos pendientes que existían en Chile respecto de sus adultos mayores y no solamente genera buenas políticas para tener más ahorro y mejorar las pensiones del futuro, sino que también encontramos la manera de darle un reconocimiento y un buen apoyo a los actuales jubilados del país y eso es de una importancia tremenda", dijo el presidente de Renovación Nacional, senador Rodrigo Galilea, quien destacó el "rol de la buena política" que se hizo presente en el Congreso Nacional. "Hubo otros partidos, pocos, que no se quisieron sumar", zanjó.
Por su parte, el senador UDI Juan Antonio Coloma manifestó: "No nos cabe duda que esta es una reforma estructural que se dio, debe de haber hecho hace 20 años atrás y que tiene un elemento central. La longevidad en Chile ha cambiado mucho. Solo en dos generaciones ha subido un 50%. No hacer nada en esta materia significaría que el costo fiscal sería el 7% del PIB, o sea, más de US$20.000 millones Había que enfrentar con decisión a lo que era impostergable. Valoramos, por tanto, que se haya subido del 10% al 16% la cotización individual".
"Esto es mejorar lo que hoy en día tenemos porque la longevidad básicamente en Chile ha cambiado y creo que esto es un paso importante para mejorar las pensiones sustentablemente en Chile", agregó.
En tanto, el senador de Evópoli Felipe Kast señaló: "Hoy día es un gran día para la política chilena donde una reforma de pensiones de buena calidad que permite aumentar las pensiones, tanto la PGU como también las pensiones de las mujeres, que no tienen ni un elemento de reparto como desgraciadamente algunos han querido desinformar, que nos permite cuidar que la plata de los trabajadores va a ser de los trabajadores, que adicionalmente nos permite tener un componente de solidaridad para que efectivamente las mujeres y hombres que ahorran lo mismo puedan tener pensiones iguales, que adicionalmente nos permite apoyar el crecimiento económico con un sistema de capital del mercado de capitales que desgraciadamente después de los retiros quedó completamente disminuido, que nos va a permitir también enfrentar las lagunas previsionales, que nos va a permitir también y esto es muy importante, que tengamos efectivamente un sistema de pensiones robusto donde las pensiones aumenten tanto hoy día como mañana".
En el oficialismo, el senador socialista Juan Luis Castro expresó: "Estamos muy contentos con la aprobación de la reforma de pensiones. Destacamos importantes avances como el aumento de la PGU a $250.000 y nuevos beneficios, incluido el bono para mujeres. Estas medidas permitirán que las pensiones aumenten entre un 15% y 35%, con un impacto significativo en la región de O’Higgins. Un gran paso hacia el bienestar de nuestros jubilados".
En la DC, el senador Iván Flores afirmó: "Tenemos un proyecto sólido, tenemos un proyecto que da satisfacción a todos los sectores políticos, hemos trabajado con unidad por los más de un millón y medio de pensionados que van a ver mejoradas sus pensiones, por las 900.000 mujeres que están siendo reconsideradas como trabajadoras del mismo nivel que los hombres que estamos emparejando la cancha y por los más de tres millones de personas que van a ver mejoradas sus PGE. Esas son cifras gruesas, son cifras contundentes, que hablan de un buen trabajo".
En la otra vereda, el senador Rojo Edwards, argumentó su rechazo señalando que: "No votaré a favor de un proyecto que pone en riesgo la estabilidad fiscal e introduce el reparto camuflado. Sin dudas, esto podría convertirse en un manotazo a la clase media y al bolsillo de los trabajadores".
Quién tampoco entregó su respaldo a la iniciativa fue la senadora Ximena Rincón (Demócratas): "Chile merece mejores pensiones. No seremos cómplices de una reforma que perjudica a quienes pretende beneficiar. Nuestro compromiso es con los pensionados, los trabajadores y la sostenibilidad del país, no con soluciones rápidas, que envejecerán mal y perjudicará a muchos No a un Transantiago Previsional!".
