Los inversores están ansiosos por acercarse a
Elon Musk, el llamado "primer compinche", que aportó dinero a la campaña del presidente de Estado Unidos, Donald Trump, y ahora dirige los controvertidos esfuerzos de recorte de gastos de la administración.
Sus empresas han ganado un valor combinado de US$613.000 millones desde las elecciones suponiendo que las rondas de financiación anticipadas vayan según lo previsto, según datos recopilados por Bloomberg.
Primero subió Tesla, luego SpaceX se convirtió en la startup tecnológica más valiosa del mundo y xAI casi duplicó su valoración antes de buscar hacerlo de nuevo.
Ahora, X busca unirse a las otras firmas de Musk para aprovechar el poder político sin precedentes del multimillonario.
Si la red social tiene éxito en su intento de recaudar dinero de los inversores a una valoración de US$44.000 millones, levantará la nube que pesa sobre ella desde que Musk pagó esa misma cantidad por ella n 2022. Y también, aumentaría su patrimonio en unos US$20.000 millones, otra subida para la persona más rica del mundo.
Mientras tanto, una avalancha de nuevas rondas de financiación para las empresas privadas de Musk, incluidas X, SpaceX y xAI, añadirán más de US$220.000 millones en valor combinado si las inversiones en C y xAI se cierran al tamaño comunicado.
De esta forma, el patrimonio neto de Musk, US$397.100 millones al cierre del martes, ha subido más del 50% desde las elecciones, según el índice de multimillonarios de Bloomberg. Si todas las rondas de financiación se cierran según lo previsto, su valor superaría los US$420.000 millones.
Valor en alza
Sin duda, los aumentos en la riqueza de Musk son ganancias sobre el papel, sin embargo, siguen representando un notable voto de fe de los inversores, incluso cuando pasa la mayor parte de su tiempo en Washington centrando en el recién creado Departamento de Eficiencia Gubernamental.
Después de las elecciones, Tesla fue la mayor ganadora entre las empresas del sudafricano. En las seis semanas siguientes a la votación, las acciones del fabricante de automóviles casi se duplicaron hasta alcanzar un máximo histórico.
Eso impulsó la fortuna personal de Musk a un máximo de US$486.400 millones el 17 de diciembre, el patrimonio neto más alto jamás registrado por el índice de riqueza de Bloomberg.
Desde entonces, las acciones de Tesla han caído alrededor de un 25%, pero la empresa sigue valiendo unos US$1,17 billones.
SpaceX y sus inversores acordaron en diciembre comprar acciones de la compañía en un acuerdo que la valoraba en unos US$350.000 millones, una prima del 67% respecto a su anterior oferta pública de adquisición, realizada menos de seis meses antes.
La nueva valoración convirtió a SpaceX en la startup tecnológica más valiosa del mundo. El martes, el presidente Trump dijo a los periodistas que no permitiría a Musk participar en ningún trabajo gubernamental relacionado con el espacio.
Por su parte, la startup de IA de Musk, xAI, lanzó su chatbot Grok-3 el lunes, y está en conversaciones avanzadas con Dell Technologies Inc. para asegurarse más de US$5.000 millones de capacidad de servidor para entrenar y operar sus modelos de IA.
Además, xAI recaudó dinero con una valoración de más de US$40.000 millones en las semanas posteriores a las elecciones, y la empresa está actualmente tanteando el terreno para otro acuerdo que casi duplicaría su valor implícito.
Asimismo, X ha sido la más sorprendente de las empresas de Musk en ver un aumento de valor. Cuando Musk compró la plataforma de medios sociales, que entonces se llamaba Twitter, por US$44.000 millones en 2022, el acuerdo fue rápidamente despreciado, ya que los anunciantes huyeron de la plataforma y ésta tuvo problemas con las interrupciones del servicio. Fidelity Investments había rebajado el valor de X en casi un 72% hasta octubre.
Sin embargo, recientemente, los bancos pudieron deshacerse de US$4.740 millones de deuda de X a la par, préstamos que anteriormente habían sido desdeñados por los inversores.