Aaron Sorkin, guionista que adaptó el libro "Matar un Ruiseñor"
AP
NUEVA YORK.- Ya antes de su estreno la obra de teatro sobre un juicio paradójicamente acabó en los tribunales: la versión de Broadway del bestseller "Matar un ruiseñor" (1960) difiere demasiado del original, argumentó Tonja Carter, la administradora de la herencia de la escritora estadounidense Harper Lee, fallecida en 2016.
"No puedo y no presentaré ninguna obra de teatro que parezca que se hubiera escrito el mismo año en que también se escribió el libro, no sería interesante", alegó el productor Scott Rudin. "El mundo ha cambiado desde entonces".
Finalmente, ambas partes presumieron de haber llegado a un "
acuerdo amistoso", no desvelaron los detalles y dejaron vía libre para llevar a Broadway la primera versión de la conocida novela.
Este jueves, casi 60 años después de su publicación, se estrena la obra de teatro con las entradas agotadas.
La obra fue acogida por el público con entusiasmo y largas ovaciones en las numerosas funciones antes del estreno. Los mayores elogios se los llevó Jeff Daniels, que interpreta al protagonista Atticus Finch, y que ya había trabajado con el guionista Aaron Sorkin en la serie "The Newsroom".
Sin embargo, el lío de los tribunales antes de la premiere deja claro una vez más que "Matar un ruiseñor" es diferente. Escrita por Lee en Nueva York, la novela dio la vuelta al mundo, se vendieron unos 40 millones de ejemplares, ganó el premio Pulitzer, fue llevada al cine por Robert Mulligan con Gregory Peck en el papel principal y ganó tres Oscar.
Hoy en día, la historia sobre el abogado Atticus Finch que defiende a un afroamericano inocente acusado de haber violado a una mujer blanca mientras da una lección de tolerancia, amor al prójimo y derechos humanos tanto a sus hijos como a toda la sociedad, sigue siendo lectura obligatoria en muchos colegios y es uno de los libros más leídos de todos los tiempos.
Pero cuanto más famosa se hacía su novela, más se replegaba su autora en su ciudad natal de Monroeville, en el estado sureño de Alabama, y en su esfera privada. Lee rechazó hacer entrevistas y escribir un segundo libro. La escritora, nacida el 28 de abril de 1926 como la cuarta hija de un abogado y su esposa que sufría trastornos mentales, nunca explicó públicamente el motivo.
Lee falleció en febrero de 2016 en una residencia de ancianos en Monroeville, pero antes sucedieron dos cosas excepcionales. La primera, sí que hubo un segundo libro. Aunque la novela "Ve y pon un centinela" publicada en 2015 sólo era un primer manuscrito de "Matar un ruiseñor", fue elogiada internacionalmente como un fenómeno literario y se convirtió también en un superventas. Además, escandalizó a los fans ya que Atticus, convertido hace tiempo en conciencia moral de Estados Unidos, de pronto era racista. Nunca se supo lo que Lee opinó sobre esta publicación tardía.
Y ahora la versión de Broadway. Se sabe que antes de su muerte, Lee había dado su consentimiento para la adaptación. Pero, ¿hubiera querido que la obra fuera tal cual llega ahora a los escenarios? La historia no difiere demasiado de la versión original y al mismo tiempo, muchos de los temas que se abordan, como el racismo y la injusticia, parecen más actuales que nunca. "Será una nueva mirada sobre material conocido", dijo a la cadena CBS el guionista Sorkin. "Será una excitante noche de teatro."