BARCELONA.- El destituido presidente de Cataluña, Carles Puigdemont, anunció hoy que retira "provisionalmente" su candidatura a la reelección para liderar la región, proponiendo a Jordi Sánchez, número dos de su lista electoral, en su reemplazo.
A través de varias redes sociales, Puigdemont dirigió un mensaje en el que justifica su decisión en que pretende favorecer que las instituciones catalanas sean "restituidas" a los ciudadanos.
Dijo, además, que un equipo de abogados internacionales ha presentado hoy en su nombre "una demanda contra el Estado español ante el Comité de los Derechos Humanos de Naciones Unidas", para denunciar la "violación" de sus derechos.
El ex líder catalán, que actualmente vive en Bruselas (Bélgica), mantiene una orden de detención en su contra en España por los delitos de rebelión y sedición, tras el intento de independencia de 2017. Por ello y por el veto del Tribunal Constitucional (TC) a admitir una investidura a distancia, se encuentra impedido de asumir funciones como presidente regional.
Sánchez, uno de los principales dirigentes del parido JxCat de Puigdemont, tiene el encargo de asumir en su reemplazo. Sin embargo, se encuentra en prisión preventiva desde el 16 de octubre mientras es investigado por sedición, en el mismo caso del intento separatista.
Su candidatura es considerada compleja, pues deberá defenderla en persona en la Cámara. Para ello, debería contar con el permiso del juez Pablo Llarena, del Tribunal Supremo, que hasta ahora ha rechazado todas las peticiones de libertad bajo fianza.
La decisión del ex presidente de la Generalitat, destituido tras la intervención en Cataluña por parte del Gobierno central de España, surge a pocas horas de que la mayoría secesionista del Parlament haya aprobado una moción en la que se reconoce su "legitimidad" como máximo líder regional, aunque sea sólo de forma simbólica.
