Tras varios días sin saberse sobre su paradero, el líder norcoreano, Kim Jong-un (36), reapareció públicamente el viernes, según informaron los medios oficiales, poniendo fin a la serie de especulaciones sobre su estado de salud producto de una supuesta cirugía, al punto de que algunos medios internacionales incluso lo dieron por muerto.
Con el tema ya esclarecido, es apropiado señalar que
los rumores en torno a la muertes de los gobernantes de Corea del Norte no son algo nuevo: se trata de un fenómeno que ha venido repitiéndose durante más de 50 años en Occidente, principalmente debido al completo hermetismo de la nación asiática.
Kim Jong-un, por tanto, no ha sido el primero, y así como él, tanto su padre como su abuelo también fueron dados por muerto alguna vez.
El primer líder dado por muerto
Según información de La Vanguardia de España, el 16 de noviembre de 1986 un periodista en Tokio del diario Chosun Ilbo, uno de los más importantes de Corea del Sur, informó sobre los rumores de la muerte de Kim Il-sung - fundador de la dinastía gobernante en 1948 y abuelo de Kim Jong-un- que se habían esparcido por Japón. Un día después, un vocero militar surcoreano aseguró haber escuchado que los altavoces norcoreanos en la frontera de ese país habían anunciado el asesinato de su líder.
Con una extensión de siete páginas el medio de comunicación nipón describía el supuesto homicidio de Kim con el titular: "Kim Il-sung muerto a tiros". A ello le siguió una réplica de las historias en varios diarios estadounidenses como The New York Times, que el 17 de noviembre de 1986 publicó en su portada una columna que decía "Kim Il-sung, de 74 años, reportado muerto".
Pero pocos días después el fundador de la República Popular Democrática de Corea, se mostró en público en el aeropuerto de Pyongyang mientras recibía a una delegación de Mongolia, situación que hizo que se apagaran todos los rumores respecto a su fallecimiento- De hecho, el líder gobernaría ocho años más antes de morir realmente.
Esta situación ilustra de forma fehaciente lo que ha provocado la hermética Corea del Norte cada vez que desaparece por unas semanas el líder de turno o figura importante del régimen sin una explicación de parte del Gobierno. A esta situación, le sigue una lluvia de especulaciones y rumores muchas veces iniciados por "fuentes anónimas".
11de abril del 2020 fue la última aparición pública de Kim Jong-un
Tras esta "fake news" de los 80', el importante diario estadounidense nunca publicó una corrección hasta que se disculpó formalmente en marzo de este año, al conmemorarse 100 años de su fundación.
Pero el hermetismo continuó en el mandato del patriarca de la dinastía Kim: su fallecimiento, ocurrido el 8 de julio de 1994, recién se dio a conocer públicamente 30 horas después. A partir de su muerte el líder fundador fue reconocido como "Presidente eterno" de Corea del Norte.
Los rumores que rodearon a Kim Jong-il
Luego de la muerte del patriarca de la dinastía Kim en 1994, el poder recayó en su hijo Kim Jong-il. El padre del actual Mandatario pasó dos veces por este tipo de rumores.
En 2004, tras el choque de dos camiones con combustible en las cercanías de una estación de trenes norcoreana que dejó a tres mil personas muertas, se especuló sobre el intento de asesinato del líder cuando iba de regreso de un viaje a Beijing, pero nunca se logró confirmar si esta coalisión tuvo relación con el paso del gobernante.
En 2008 se comenzó a notar su claro deterioro de salud. Ese año las especulaciones sobre su muerte después de haber sufrido un infarto y sus continuas ausencias se hicieron cada vez más frecuentes. Incluso, según la agencia AP, un regulador financiero de Corea del Sur llegó a investigar si estos constantes rumores se difundían deliberadamente para manipular los mercados bursátiles.
Pero cuando el delicado estado de salud sí lo llevó a la muerte en diciembre de 2011, sus cercanos lograron mantener oculta la información durante dos días, hasta que los medios estatales informaron públicamente el deceso. Hasta ese momento, ni Washington ni Seúl se habían enterado de la noticia. Y luego vino la asunción al poder de su hijo Kim Jong-un.
"Histórico hermetismo de Corea del Norte"
La experiencia de estos dos líderes y lo que está pasando con el actual gobernante norcoreano, según el experto y director del Observatorio de Asuntos Internacionales de la Universidad Finis Terrae, Alberto Rojas, está influenciado por el "histórico hermetismo de Corea del Norte", que "ha buscado durante décadas proteger a sus principales figuras políticas y militares de, supuestamente, potenciales amenazas externas".
Según Rojas, este modo de operar de Corea del Norte también ha servido para "resolver asuntos internos como purgas políticas, problemas de salud o fallecimientos imprevistos. Y eso, varias veces, ha generado una importante distorsión de los hechos".
"El silencio por parte de las autoridades norcoreanas puede depender de la gravedad del tema, pero sobre todo de la capacidad para resolverlo. En especial si estamos hablando del siempre delicado tema de la sucesión en un país que es una dictadura desde hace más de 70 años"
Alberto Rojas, director del Observatorio de Asuntos Internacionales de la Universidad Finis Terrae
Pero según el experto esta "práctica no es nueva". "Durante la Guerra Fría, la Unión Soviética mantuvo una estrategia similar, guardando un silencio impenetrable cuando alguno de sus jerarcas desaparecía por un largo tiempo del ámbito público. Algo que, inevitablemente, generaba todo tipo de especulaciones en Occidente. Y que en muchos casos sí coincidía con muertes inesperadas".
En el contexto actual "vale la pena señalar que el silencio por parte de las autoridades norcoreanas puede depender de la gravedad del tema, pero sobre todo de la capacidad para resolverlo. En especial si estamos hablando del siempre delicado tema de la sucesión en un país que es una dictadura desde hace más de 70 años", expresó Rojas a Emol.
La situación del último Kim
Pero ahora le ha tocado el turno a Kim Jong-un, de 36 años y que estuvo 20 días "desaparecido" del ojo público.
En 2014, la ausencia del gobernante dio pie a especulaciones sobre un presunto golpe de Estado. Pero a los 40 días de su desaparición en la vida pública, el líder reapareció ocupando un bastón, y se cree que sufrió un ataque de gota.
Las informaciones sobre supuestos problemas de salud de Kim surgieron en los medios internacionales las últimas semanas y se hicieron cada vez más frecuentes debido a las interrogantes que levantó la ausencia del líder en la vida pública desde el 11 de abril pasado, cuando presidió la sesión del politburó.
Los rumores se hicieron cada vez más fuertes cuando, cuatro días después, el líder norcoreano no apareció en la principal festividad de su país, el
Día del Sol, que se celebra en conmemoración del aniversario del nacimiento de su abuelo Kim Il-sung, ya que desde su ascenso al poder, Kim
nunca había dejado de encabezar la festividad, informó Reuters.
Por lo que el joven gobernante volvió a estar en el centro de la polémica. Se dijeron muchas cosas en los medios internacionales: que estaba convaleciente de una operación, que se encontraba en coma e incluso que estaba protegiéndose del covid-19.
Pero la verdad es que solamente el círculo más cercano del gobernante sabe lo que realmente ocurrió en Pyongyang. El Gobierno ya habló y desmintió todo y probablemente nunca revele el porqué de la ausencia de su máximo líder.
