La OEA realizó una reunión extraordinaria el viernes recién pasado para discutir sobre las elecciones en Venezuela, las que han sido calificadas como "fraudulentas" tras proclamar nuevamente a Nicolás Maduro como presidente. En este contexto, es en el que el embajador de Uruguay, Manuel Washington Abdala, tuvo su turno para intervenir, momento que da vuelta en las redes sociales por su acalorado discurso.
Si bien en su intervención, Washington comenzó con una voz calmada y tranquila, informando que hace días el canciller uruguayo, Omar Paganini, denunció que en Venezuela se está persiguiendo, deteniendo y haciendo desaparecer gente, avanzado su discurso, comenzó a subir el tono mientras hablaba de derechos humanos.
"Nadie reclama el respeto a los derechos humanos, ¡qué casualidad! Que el tema de reclamar el respeto a los derechos humanos es absolutamente central. Porque nadie le reclama esto al que los respeta. Cuando se pide respeto es porque se entiende que hay un irrespeto, un agravio", sostuvo.
"Y qué casualidad que empiece a funcionar casi que como una consigna asertiva y metafórica, 'entreguen las actas', porque lo que sabemos todos es que en esa frase está diciendo es que las actas dicen lo que dicen en torno a Edmundo González y a la forja monumental que ha tenido María Corina Machado (...) Y tengamos claro algo, porque no siempre todos los miembros de esta organización coinciden con la CIDH. Pues yo hoy felicito a la CIDH por un comunicado valiente, donde no andan con ambigüedades. Habla de terrorismo de Estado, habla de políticas y prácticas autoritarias y de un patrón sistemático de violaciones de la libertad personal. ¿Qué no se entiende?", expresó.
"Gente especializada en torno al asunto nos está diciendo 'está pasando lo peor'. Estamos ante una dictadura oprobiosa, lo peor que le ha pasado al continente en mucho tiempo y esto lo tenemos que enfrentar sin mucha retórica. Acá nadie tiene el manual de cómo se sale de las dictaduras, pero no se sale felicitándolas", dijo para luego referirse a diversas experiencias de estos casos.
"Entonces, yo tengo mi manual y cada uno tendrá su manual de cómo se sale de las dictaduras. Ahora no se sale felicitándolas, se sale diciéndoles 'señor, respete el resultado, es evidente, empírico y fáctico, y gano Edmundo González. Señor, ¿Qué no entiende usted Maduro? ¿Qué es lo que usted no entiende?", se preguntó.
En este minuto, Washington ya se encontraba gritando. "Y lo grave de esto, cuando estamos ante el terrorismo de Estado, es que algunos leen los derechos humanos de una forma cuando pasan algunos lados y pasan otros los leen de otra forma. Son los mismos derechos humanos, es la misma gente que está entregando vida, sacrificio, todo. ¿O qué creen, que hay ocho millones de venezolanos que salieron a hacer turismo por el mundo?".
Finalmente, volvió a cuestionar "¿Qué no se entiende?", justificando y pidiendo perdón por su manera de expresarse. "Entonces el tono es este, es un tono, sí, pasional. Pido disculpas, pero no hay mucho espacio más. Y habrá que seguir insistiendo. Y si tenemos que sesionar 10 días, 15 días, 20 días, habrá que seguirlo haciendo. ¡Habrá que seguirlo haciendo! Y habrá que seguirle diciendo al dictador, ¡Señor, se tiene que ir de ahí, ya no lo respalda nadie!", concluyó.
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