La Yihad Islámica palestina y Hamás pusieron a disposición de la Cruz Roja este jueves en el sur de Gaza a los rehenes israelíes Arbel Yehud y Gadi Moses, así como a cinco ciudadanos tailandeses, en una caótica puesta en libertad entre miles de gazatíes que acudieron al lugar.
"Según la información comunicada por la Cruz Roja, siete rehenes, incluyendo dos israelíes y cinco ciudadanos extranjeros les fueron transferidos", confirmaron las fuerzas armadas israelíes.
Los milicianos escoltaron a Moses, de 80 años, hasta la misma furgoneta en la que se encontraba Yehud, según el corresponsal en el lugar de la cadena catarí Al Jazeera, si bien las imágenes no permitieron ver estos movimientos que se produjeron en medio de
una multitud de personas, muchos de ellos rodeando los vehículos.
Los ciudadanos tailandeses fueron trasladados a otros dos vehículos. Todos ellos fueron puestos a disposición del Ejército israelí en el cruce de Kerem Shalom, en el extremo sureste de Gaza.
La puesta en libertad se produjo frente a la casa en ruinas del líder de Hamás en la Franja y autor intelectual del ataque del 7 de octubre de 2023, Yahya Sinwar, al que las tropas israelíes mataron el pasado octubre en Rafah, también en el sur de Gaza.
Entre gritos de "Alá es grande", silbidos y aplausos, las imágenes difundidas hasta el momento muestran cómo Yehud atraviesa la multitud hacia las furgonetas de la Cruz Roja.
Miles de personas, entre civiles y milicianos, algunos cargando banderas de Hamás o de la Yihad Islámica, acudieron al punto de liberación en Jan Yunis para ver el traspaso de los rehenes a los operativos de la Cruz Roja.
"Las multitudes que se reunieron para seguir la liberación de prisioneros son un mensaje al mundo de que nuestro pueblo se une firmemente a la resistencia y la abraza, y que la ocupación no ha logrado aislarla", dijo Hamás en un comunicado.
Los mismos representantes de Cruz Roja Internacional que recogieron hacia las 10.00 hora local (05:00 en Chile) a la mujer soldado en Yabalia, en el norte de Gaza, bajaron en un convoy hasta la sureña Jan Yunis para certificar la liberación del resto de cautivos.
La liberación en Jan Yunis se asemejó al primer canje de rehenes, el pasado 19 de enero, en el que las cautivas también eran civiles, si bien más gazatíes acudieron en esta ocasión.
La de la soldado Agam Berger hoy en Yabalia (norte) y de sus cuatro compañeras militares el pasado sábado tuvieron un carácter distinto, menos multitudinario pero más teatralizado, en el que los milicianos hicieron a los operativos de Cruz Roja y a las rehenes, ataviadas con uniformes del Ejército, subir a un escenario.
Ante la cantidad de gente que se encontraba en la zona, los milicianos tuvieron que abrir un camino entre la multitud que permitiera la salida de las ambulancias.
Decisión de Israel
Tras las escenas de este jueves, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, junto al ministro de Defensa, Israel Katz, ordenó este jueves posponer la liberación de más de un centenar de presos palestinos, prevista para las próximas horas, "hasta que se garantice la salida segura de sus rehenes".
Netanyahu ya había criticado en otro comunicado "las escenas impactantes ocurridas durante la liberación" de Arbel Yehud, Gadi Moses y otros cinco trabajadores tailandeses.
"Exijo a los mediadores garanticen que escenas tan amenazantes no se repitan y que se garantice la seguridad de nuestros rehenes", subrayó el líder israelí.
Y finalizó advirtiendo que "cualquiera que se atreva a hacer daño a nuestros cautivos, su cabeza quedará ensangrentada".
Por su parte, el foro que representa a las principales familias de los rehenes lamentó también lo que calificaron como unas "imágenes desgarradoras" que "inundaron sus corazones de miedo", según un comunicado en el que urgieron a que se haga "todo lo posible para garantizar su protección y la reunificación inmediata con sus seres queridos".
"Después de 482 días de terror y sufrimiento inimaginables, estas personas, que ya han soportado lo impensable, no deben ser sometidas a más peligro. Este proceso, marcado por la crueldad y el desprecio por la dignidad humana, debe ser condenado inequívocamente", dijo el grupo.
Este jueves Israel y Hamás habían pactado el tercer intercambio como parte del acuerdo de alto el fuego en el que se iban a canjear ocho rehenes por 110 presos palestinos, entre ellos hombres y mujeres.