Los presos estadounidenses vuelven a su país.
AFP
Las autoridades de Venezuela liberaron este viernes a seis estadounidenses presos, tras una reunión en Caracas entre el líder chavista Nicolás Maduro y un enviado especial del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
"Acabo de ser informado que estamos trayendo a casa a seis rehenes desde Venezuela", publicó Trump en X.
"Nos ponemos en marcha y nos dirigimos a casa con estos seis ciudadanos estadounidenses", anunció poco antes en esa red social el emisario estadounidense, Richard Grenell, quien divulgó una fotografía en la que se le ve con los seis liberados en un avión, aunque sin identificarlos.
Antes del encuentro entre Maduro y Grenell, la ONG Foro Penal, dedicada a la defensa de presos políticos, contabilizaba a ocho ciudadanos de Estados Unidos, entre ellos un militar, y dos ciudadanos de otras nacionalidades con residencia en ese país encarcelados en Venezuela acusados de conspirar contra Maduro y planificar actos de violencia.
Por su parte, Maduro abogó por un "nuevo inicio" en las relaciones de Venezuela con Estados Unidos, rotas desde 2019, para que lo que "haya que rectificar se rectifique" y lo que "haya que hacer se haga".
El líder venezolano le planteó a Grenell lo que denominó como una "Agenda Cero" para reconstruir puentes, en medio de una renovada crisis política por los cuestionamientos de Washington a su reelección el 28 de julio del año pasado, denunciada por la oposición como un fraude.
"Puedo decir que -la reunión- fue positiva (...) Hay temas donde hemos llegado a unos primeros acuerdos y como se cumplan se abrirán nuevos temas, ojalá, para nuevos acuerdos", dijo Maduro durante un discurso en la apertura del año judicial.
"Le decimos al presidente Donald Trump: hemos dado un primer paso. Ojalá se pueda sostener, nosotros queremos sostenerlo", añadió el mandatario al señalar que el sábado se informarán más detalles de la reunión.
Formalmente, Washington desconoce la reelección de Maduro para un tercer mandato (2025-2031) y el jefe de la diplomacia estadounidense, Marco Rubio, expresó apoyo al exiliado Edmundo González Urrutia, quien reivindica un triunfo en los comicios presidenciales.
El gobierno del demócrata Joe Biden tampoco reconocía a Maduro, pero emprendió negociaciones directas Caracas-Washington.