Tras el término del trabajo de la Convención, el vicepresidente Gaspar Domínguez, afirmó que "el desafío es que la ciudadanía pueda hacer un juicio en base al resultado del texto" de nueva Constitución y no sobre el comportamiento de algunos convencionales.
En entrevista con Tele 13 Radio, Domínguez comentó que más allá de los sondeos como Cadem, "creo que hay un hecho cierto, hay mucha gente dudosa y hay mucha gente que está rechazando si la elección fuera ahora, eso es un hecho, basta conversar con familiares, amigos, recorrer cualquier parte de mi región para poder constatarlo".
"Entonces yo creo que aquí tenemos una tarea muy desafiante (...) Hay personas que rechazaron en el Plebiscito de entrada y van a rechazar en el Plebiscito de salida sin mayor cuestionamiento, porque les acomoda que siga vigente la Constitución actual. Pero hay otras personas que el motivo del rechazo es justamente la desconfianza que provocó la Convención Constitucional como órgano, dado todas las cuestiones excéntricas y caóticas que ocurrieron en el proceso, partiendo por la mentira de un convencional o las escenas de convencionales haciendo cuestiones que no corresponden", sostuvo.
En esa línea, consideró que "el desafío es que la ciudadanía pueda hacer un juicio en base al resultado del texto y no en base a cuestiones del todo reprochables que puedan haber realizado uno, dos o diez convencionales".
Pero también indicó que hay personas que "no les gusta el texto, porque creen que no tiene algo que no tiene (...) Estamos frente una situación de que las personas conozcan el texto y disocie el texto de la Convención digamos como cuestiones distintas y que además comprendan y conozcan las normas que están contenidas en el texto (...) y que parte de las personas que hoy están rechazando puedan reconsiderar su voto".
Respecto al tiempo con el que cuentan para ello durante la campaña, Domínguez planteó que dos meses "es un tiempo escaso, pero es el tiempo que hay. El texto definitivo estará el lunes (...) Espero que las campañas se basen en hechos ciertos y no en producir miedo que es una tendencia que hemos visto en muchas elecciones en las últimas décadas".
Además, el vicepresidente enfatizó que "la Convención y la Constitución es una cosa, y otra cosa distinta es el Gobierno (...) Es cierto que algunas cuestiones que el programa de Boric quiere llegar a hacer no podrían hacerse con la Constitución vigente, eso es un hecho", añadiendo que "es del todo lógico que el gobierno manifieste que de no ser aprobada la nueva Constitución habría dificultades para por ejercer su programa, me parece que es algo obvio".
