Una serie de desafíos tendrá que llevar adelante Jaime Gajardo, hasta hace poco subsecretario de Justicia y ahora actual ministro de dicha cartera, luego que Luis Cordero dejará el cargo y asumiera como subsecretario del Interior tras la salida de Manuel Monsalve. El Plan Nacional de Búsqueda, la nueva cárcel de alta seguridad para reos del crimen organizado en la comuna de Santiago, el proyecto que modifica el sistema de nombramientos presentado a mitad de semana y las inminentes gestiones para llenar los cupos en la Corte Suprema son solo parte de los temas que ahora, como titular de la cartera, deberá abordar Gajardo. Se prevén posibles dificultades en el Congreso, en especial con la oposición, dada la militancia comunista de Gajardo. El exministro de Justicia José Antonio Gómez cree que en Gajardo primara la mirada técnica, aunque agrega que "la oposición siempre tiene desconfianza con las militancias de los partidos y particularmente con el PC, pero de verdad no creo que sea relevante". En todo caso, estima que lograr acuerdos transversales en diversos temas "depende de él. Si él tiene una mirada ideológica, el tema va a tener problemas". El ex subsecretario de Justicia Sebastián Valenzuela añade que el proyecto que modifica el sistema de nombramientos "aparece como impostergable y, por más que haya cambiado el ministro, tiene que avanzar prontamente en el Congreso" para tener un sistema "más transparente, basado en el mérito, que despeje cualquier tipo de conflicto".
