Metro de Santiago (imagen referencial).
El Mercurio/Archivo
En el marco del Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA), el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN) se pronunció favorablemente, con observaciones menores, sobre la tercera adenda complementaria presentada por Metro para la construcción de la futura Línea 9.
Tras la revisión de los antecedentes en las comisiones técnicas del CMN, los consejeros evaluaron favorablemente las medidas propuestas por la empresa para todos los componentes patrimoniales que se verán afectados por la ejecución de la obra: monumentos arqueológicos, paleontológicos, monumentos públicos, monumentos históricos e inmuebles situados en zona típicas o pintorescas.
"La Línea 9 del Metro es un gran ejemplo de cómo el trabajo coordinado entre el CMN y Metro permite compatibilizar el desarrollo de infraestructura clave con la protección del patrimonio. En este proceso, hemos trabajado de manera virtuosa revisando modelos y acordando una nueva metodología de trabajo óptima para la revisión arqueológica", dijo la subsecretaria del Patrimonio Cultural y presidenta del CMN, Carolina Pérez Dattari.
Añadió que "esta nueva línea, que recorrerá 27 kilómetros desde Recoleta hasta Puente Alto, beneficiará la conectividad a miles de personas en la capital. Seguiremos impulsando este diálogo permanente entre las partes, un modelo de trabajo que también estamos replicando con distintos ministerios sectoriales para garantizar que las obras públicas avancen en armonía con la conservación de nuestro patrimonio".
El pronunciamiento se hará llegar vía oficio al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), el que, considerando esta y las respuestas de los otros órganos del Estado con competencia ambiental, deberá evaluar la entrega de la Resolución de Calificación Ambiental (RCA), para habilitar la construcción del proyecto.
Sobre el componente arquitectónico, ya se dio conformidad a la intervención en el Monumento Histórico (MH) Biblioteca Nacional y en el MH Piscina Escolar de la Universidad de Chile, así como a los trabajos en la Zona Típica o pintoresca (ZT) Barrio Matta Sur.
Sin embargo, se reiteró la importancia de instalar una mesa de trabajo, a la cual se integre el Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones, para abordar el reordenamiento del entorno de la Biblioteca Nacional, considerando que el emplazamiento del acceso secundario por calle Mac Iver se verá afectado por los nuevos flujos que generará la Línea 9, en pos de una solución integral para el espacio público.
En cuanto a los Monumentos Públicos (MP), junto con dar conformidad a los antecedentes, se entregaron algunas indicaciones tendientes a la protección del MP a los Historiadores, que debe considerar un proyecto de retiro e intervención y los tratamientos de conservación-restauración asociados a él, junto con medidas de protección para los MP que pudiesen verse afectados por las cercanías a los cierres perimetrales de las instalaciones de faenas.
En relación al componente arqueológico, se decidió otorgar conformidad a las propuestas de rescate presentadas, con algunas indicaciones, tales como la inclusión de análisis faltantes y de informes de sondeo en instalaciones de faenas pendientes, que el titular ha comprometido a completar una vez obtenida la RCA favorable. También se comprometen tres puestas en valor, que serán presentadas una vez que los rescates arqueológicos hayan sido finalizados.
Por último, con respecto al componente paleontológico, se estableció la ejecución de monitoreos con frecuencia mensual (que podrían aumentar a quincenal, solo en el caso de haber hallazgos) y la entrega de los informes respectivos también cada 30 días.