Según explica Enrique Paris, director del Centro de Información Toxicológica de la Universidad Católica (CITUC), los parabenos son sustancias químicas muy estables y no volátiles, derivadas del ácido parahidroxibenzoico. Su uso -agrega- es fundamentalmente cosmético y farmacéutico.
Por su parte, Ivonne Vergara, bioquímica de Clínica Las Condes, sostiene que los parabenos sirven como preservantes. "En el fondo lo que hacen es alargar el tiempo de vida de un producto", dice. ¿La razón? Son sustancias sintéticas que tienen propiedades bactericidas y fungicidas, es decir, inhiben el crecimiento de bacterias y hongos.
El doctor Paris añade que la población normal absorbe los parabenos a través de la piel, y los elimina por la orina en forma casi inmediata y en un cien por ciento. "No se quedan circulando por el organismo", asegura. Sin embargo, el médico advierte que sí tienen un inconveniente: pueden producir alergias, las que se manifiestan en irritación de la piel, ardor y prurito.
Hasta aquí pareciera tratarse de sustancias prácticamente inofensivas para la salud, una opinión que no es compartida por todos. En 2004, la doctora Philippa Darbre reveló que en una investigación realizada por la Universidad de Reading (Gran Bretaña), científicos habían detectado la presencia de parabenos en los tumores de pacientes con cáncer de mama.
Según la especialista, estas sustancias imitaban la acción de los estrógenos, los que pueden dirigir el crecimiento de tumores de pecho en humanos. De esta manera, Darbre instaló el tema en la palestra y dejó abierta la interrogante respecto a si los parabenos deben ser eliminados de los productos cosméticos, sobre todo de aquellos que se aplican en la zona del pecho.
"La literatura científica dice que no son riesgosos para cáncer en las dosis y concentraciones en que se están usando en este momento", sostiene Nuvia Aliaga, oncóloga de Clínica Las Condes, especialista en cáncer de mama. "Siempre y cuando -continúa- las empresas que los utilicen tengan un respaldo internacional". Y en el caso de los parabenos, la mayor garantía está dada por la Food and Drug Administration (FDA) de Estados Unidos, institución que los aprueba.
"Los estadounidenses son súper estrictos en todo esto. Entonces, no es que estén diciendo que tal vez el día de mañana no se descubra que son cancerígenos, pero si son claros y tajantes en decir que en las dosis actuales en que se están usando, no deberían considerarse cancerígenos", enfatiza.
Mejor prevenir que...
Entonces, ¿por qué algunas compañías cosméticas están eliminando estas sustancias de sus productos? A juicio de la doctora Aliaga, se trata de un tema de prevención. "Si en algunos años más alguien en Estados Unidos escribe 'los parabenos no son cancerígenos' y luego se demuestra que sí lo son, puede producirse el mismo boom de demandas que hubo cuando los estadounidenses creyeron que las prótesis de silicona causaban enfermedades reumáticas", explica.
El episodio al que hace referencia la oncóloga ocurrió en la década de los '90 y en esa oportunidad -recuerda- fue un escándalo. "Los estadounidenses perdieron mucha plata, porque hubo gente que se sacó en forma masiva las prótesis", relata. Unos años después se demostró que los implantes no restaban relacionados con ese tipo de males.
Según Nuvia Aliaga, la controversia que gira en torno a los parabenos es un tema que aún está en pañales. De hecho, la especialista explica que cuando se dio la voz de alarma respecto a la posibilidad de que fueran cancerígenos, el National Cancer Institute -"uno de los más grandes referentes de cáncer en medicina"- salió a decir que los estudios eran pocos.
"Habría que hacer un estudio grande, con una gran cantidad de pacientes, como para que tuviera peso o validez estadística. Y eso no se ha hecho ni en Europa ni en Estados Unidos", afirma la oncóloga. Y el motivo de fondo -agrega- es que en los casos de cáncer de mama son más importantes otros factores de riesgo, como el hecho de ser mujer o de que en la familia de la paciente haya casos de la enfermedad. "Es más, en este momento las tablas de riesgo del cáncer de mama no incluyen en ninguna parte el uso de los parabenos", señala.
Otro organismo que asumió el tema con cautela es la Organización Mundial de la Salud (OMS). "Tampoco habla de que son cancerígenos, sino que tiene cuidado en poner 'probablemente' o 'tal vez' o 'hay que considerar' o 'hay que esperar'. Faltan estudios concluyentes al respecto", asegura la especialista.
Sin embargo, hay empresas que han preferido no esperar y no incluyen a los parabenos entre los ingredientes de sus productos. Vichy, La Roche Posay, Kiehl's, Burt´s Bees, Lazartigue y Weleda son algunas de ellas.