El Rey Juan Carlos de España, padre del monarca Felipe VI, evoluciona satisfactoriamente de la operación de corazón a la que fue sometido este sábado, y aunque está despierto y empezó a ingerir alimentos, aún deberá permanecer en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital.
La gerente del Hospital Universitario Quirón Salud de Madrid, centro privado donde el rey fue intervenido de un triple "bypass" aorto-coronario, Lucía Alonso, leyó este domingo el parte médico en el que informó de su evolución.
Según este parte, el anterior jefe del Estado evolucionó satisfactoriamente durante las primeras horas del post-operatorio.
"El paciente está despierto, con situación neurológica normal, respirando espontáneamente sin apoyo ventilatorio y con mínimo soporte vasoactivo", añade el texto.
Además, asegura que Juan Carlos de Borbón presenta "buen estado de ánimo, se ha levantado y ha comenzado a ingerir alimentos".
No obstante, durante las próximas horas está previsto que continúe su control post-operatorio en la UCI.
El "bypass" es la cirugía cardíaca más común y permite crear un nuevo camino o desvío en una arteria bloqueada para que la sangre llegue al corazón, para ello, se toma un tramo sano de una vena de la pierna o una arteria del pecho o la muñeca, y se une a la arteria coronaria afectada, de tal forma que se crea un atajo que evita el bloqueo.
Juan Carlos de Borbón, de 81 años, ingresó la noche del pasado viernes en el hospital para someterse a esta operación, decidida por los facultativos tras la revisión médica periódica a la que se sometió en la misma clínica el pasado mes de junio.
Ayer recibió la visita de su hijo, el rey Felipe VI, y de su esposa, la reina Sofía.
Esta es la operación número 17 del anterior jefe del Estado, muchas de ella de carácter traumatológico, y la tercera desde que abdicó a favor de su hijo, el actual monarca Felipe VI, en junio de 2014.
El anterior jefe del Estado, tras abdicar, decidió el pasado 2 de junio abandonar sus actividades de carácter oficial.