SANTIAGO.- El club Perugia de Italia deberá abonar poco más de un millón de dólares al futbolista chileno Héctor Tapia por anulación del contrato por tres años firmado en el 2000.
Así lo declaró el representante y padre del jugador, del mismo nombre, quien explicó que el impasse con el club surgió al regreso del delantero de los Juegos Olímpicos de Sydney 2000.
"Con Perugia -narró Héctor Tapia padre- firmamos en julio del año pasado un contrato por tres años, pero mi hijo se lesionó en el torneo olímpico y entonces ellos exigieron que bajásemos los montos de la negociación, a lo que nos negamos".
"Ellos dijeron que si no lo hacíamos, Héctor no iba a jugar para Perugia, pero tampoco le iban a pagar. Entonces, decididos a poner fin al contrato de manera unilateral, concurrimos a la FIFA", añadió.
El organismo rector del fútbol internacional aconsejó a Tapia, en vista de estar en posesión del pasaporte comunitario, que lo representara la Associazione Italiana Calciatori, la que reclamó el pago al Perugia por daños deportivos y psicológicos. Y ahí están los resultados.