Colo Colo, cantemos todos de Arica... (parte 2)

Colo Colo cumple 80 años, desde que fuera fundado por un puñado de amigos en el estadio El Llano.

19 de Abril de 2005 | 18:24 | Felipe Gálvez, Felipe Vásquez y Arturo León, El Mercurio en Internet

"Tricampeones, jamás lo van a ser"

La frase es de un cántico de la hinchada alba, dedicada a sus rivales. Y es que en un país con pocos triunfos destacables, ser Tricampeón es digno de festejarse, más aún cuando sólo dos clubes lo han logrado. Para los demás equipos, no haber nunca ganado tres títulos seguidos es algo difícil de aceptar. Los que sí lo hicieron fueron Magallanes –que se quedó con los primeros tres títulos del fútbol chileno, en 1933, 34 y 35- y Colo Colo.

De la mano de Arturo Salah, y con la base de la oncena que conquistaría luego la Copa Libertadores, Colo Colo logró el Campeonato Nacional de 1989. En 1990, ya con Mirko Jozic, el club albo conquistó el bi. Y en 1991, además de ser el mejor club sudamericano, Colo Colo amarró el ansiado Tricampeonato. 1992 pudo haber sido el año del tetra, pero al fracaso en la Libertadores se sumó una baja en el rendimiento que significó ceder el título a Cobreloa por dos unidades de diferencia.

Colo Colo tendría luego otro "Tricampeonato", aunque más discutible. Fue el equipo con mejor rendimiento al cabo de 1996, 1997 y 1998, siempre bajo el mando del paraguayo Gustavo Benítez. Pero en 1997 debutaron en Chile los torneos cortos y el equipo popular perdió el Apertura con Universidad Católica, por diferencia de gol, a pesar de que a la postre ese año acabó con más puntos.

Sí se toca

José Daniel Morón; Miguel Ramírez, Lizardo Garrido y Javier Margas; Gabriel Mendoza, Eduardo Vilches, Juan Carlos Peralta y Jaime Pizarro; Rubén Espinoza; Marcelo Barticciotto y Luis Pérez. La formación titular de Colo Colo la noche del miércoles 5 de junio de 1991 quedó grabada con letras de oro en el escaparate de los mejores recuerdos del fútbol chileno. Fue la noche del triunfo, donde la Libertadores fue tocada por primera, y hasta ahora única, vez.

También hay que nombrar a Leonel Herrera, que también jugó y anotó esa noche, y a Rubén Martínez, Ricardo Dabrowski, Raúl Ormeño y Patricio Yáñez. Todos baluartes de un equipo comandado desde la banca por el croata Mirko Jozic.

Fueron 12 partidos, con siete triunfos y sólo dos derrotas. Y más de una final. Porque aunque la copa se levantó tras el 3-0 ante Olimpia en el Monumental, el duelo ante Boca Juniors en Santiago fue una verdadera batalla difícil de olvidar. Y aunque hasta hoy se recuerda al de 1973 como el mejor once albo de la historia, será difícil opacar lo logrado por el Colo Colo 91, que dejó inscrito su nombre en la placa de la copa que todos quieren tener.

La Noche Alba y su oscuro futuro

Aún sin el apelativo de Noche Alba, la nueva estrategia de marketing que introdujo el dirigente Jorge Vergara Núñez en Colo Colo y en el fútbol chileno debutó el 13 de enero de 1992.

El título de la Copa Libertadores de América conseguido la temporada anterior llevó a la dirigencia alba a reforzar "convenientemente" el plantel que dirigía el croata Mirko Jozic. En aquella ocasión llegaron el uruguayo Mario Rebollo, el argentino Claudio Borghi y el chileno Aníbal González. La idea era acerca al plantel a la hinchada, llenar el estadio como signo de popularidad y ganar, de paso, unos pesos tras cobrar una módica entrada.

Y de ahí no paró, año tras año, y también el resto de los equipos se contagió. La Noche Azul, Caturra, Celeste... Muchos nombres, varios sorpresivos; muchos inventos, los más inimaginables.

Este año no hubo helicópteros ni siquiera un miserable guatapique. La Noche Alba 2005 careció hasta de sorpresas, porque sólo los cinco jugadores que todo el mundo sabía (Juan Manuel Lucero, Arturo Sanhueza, Daniel Sanabria, Alejandro Carrasco y Braulio Leal) fueron los únicos ofrecidos al paladar de la hinchada alba en el ya venido a menos rito popular.

La quiebra, el punto negro en el firmamento blanco

El 23 de enero de 2002 pasó a ser una mancha negra en la historia de Colo Colo, y también del fútbol chileno. Ese día, la jueza Helga Marchant, del 22º Juzgado Civil de Santiago, declaró la quiebra de la institución alba por deudas impagas con la empresa Alianza Chilena de Leasing por 59 millones de pesos (unos 90.000 dólares) de un total cercano a los 400.000 dólares.

A fines de 2001 las dependencias del club albo carecían de agua potable y luz y a los trabajadores (jugadores y funcionarios) se les debían varios meses de sueldos. Es por esto que la llegada del síndico Juan Carlos Saffie fue vista como si se tratara de un “Mesías”.

Mucha agua ha corrido bajo el puente. La deuda total que se acercaba a 20 mil millones de pesos casi no ha sido rebajada, salvo una cifra cercana al 10 por ciento gracias a algunos avenimientos y a la venta de inmuebles como la sede de Cienfuegos y el Teatro Monumental.

Hoy la sindicatura está a cargo de Patricio Jamarne, quien reemplazó a Saffie cuando éste se retiró de su cargo como síndico, tras firmar el convenio de administración (14 de mayo de 2003). Y el objetivo es convertir a Colo Colo en una sociedad anónima, para lo cual el proyecto Blanco & Negro, aprobado por el 82% de la Junta de Acreedores, busca colocar acciones del club en la Bolsa para sanear la institución pagando la totalidad de la deuda y teniendo el control de la institución por los próximos 30 años.