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| El gran duelo |
Brasil y Argentina han sido los amplios dominadores del Mundial Sub 20 en los últimos años. De hecho, de las seis últimas versiones, entre ambos se han repartido cinco trofeos.
Por el momento ambos equipos tienen cuatro títulos acumulados en su palmarés, por lo que aspiran a que en Holanda la balanza definitivamente pierda su equilibrio.
España, que ganó el Mundial en 1999, es el único cuadro que ha sido capaz de romper la "dinastía" sudamericana que desde 1993 reina en la máxima cita juvenil planetaria. |
DOETINCHEM.- La decimoquinta edición del Mundial Sub 20 de fútbol comienza en Holanda con 24 equipos en carrera en busca del mismo objetivo. Entre los aspirantes figura el vigente campeón, Brasil, que pugnará por su quinto título de la categoría, mientras que Chile retorna después de cuatro años de su última participación.
Desde el 10 de junio al 2 de julio, seis sedes acogerán a los mejores equipos del mundo de la categoría, en el que sus jugadores tratarán de aprovechar al máximo la mayor vitrina del mundo para captar la atención de los clubes europeos.
En una época de recesión económica en el fútbol, en comparación con la situación de hace cuatro o cinco años, salvo para unos pocos clubes, este campeonato se convierte en la posibilidad de descubrir a esa perla aún por pulir y que dentro de tres años ocupe las portadas más destacas.
Algunos llegan ya con cierto cartel, como los argentinos Sergio Agüero y Lionel Messi, los brasileños Diego Tardelli, Fabio Santos y Ed Carlos o los españoles Cesc Fabregas y Juanfran Torres, pero la inmensa mayoría llega a Holanda con el afán de demostrar que tiene un futuro en el mundo del fútbol profesional.
De anteriores ediciones salieron como triunfadores jugadores de renombre, como los argentinos Pablo Aimar y Javier Saviola o el goleador brasileño Adaílton, entre muchos otros.
El retorno de la "Roja"
La selección chilena retorna a la máxima competencia juvenil luego de un pobre paso por el Mundial de Argentina (2001), donde el equipo nacional resultó eliminado en la primera fase en la última posición de su grupo, entonces dominado por Ucrania y Estados Unidos.
Antes de esa participación, la selección nacional sólo había actuado en dos ocasiones previamente: 1995 en Qatar y 1987 como local, cuando se logró el histórico tercer puesto, en el torneo entonces ganado por Yugoslavia.
El equipo adiestrado por José Sulantay llega lleno de ilusión a los Países Bajos, con una fase de preparación interesante y auspiciosa, en base a un plantel lleno de talento. Sólo la lesión de Juan Gonzalo Lorca restó un valor importante a la nómina, que sí cuenta con la mayoría de los jugadores que brillaron en el Sudamericano de Colombia, como Matías Fernández, José Pedro Fuenzalida y Nicolás Canales.
El camino del combinado nacional estará obstaculizado por España, Honduras y Marruecos. El debut será ante los centroamericanos el sábado 11 de junio.
Los grandes presentan su candidatura
Es Brasil, como casi siempre en cualquier torneo de fútbol, el principal favorito, si bien se encontrará con España que a diferencia de la selección absoluta, en los últimos tiempos casi siempre presenta batalla en torneos de selecciones menores. Además, Argentina, Alemania y la anfitriona Holanda también presentan selecciones de alto nivel, mientras que Italia vuelve a la competición tras diecisiete años de ausencia.
El exotismo correrá a cargo de Benin, sin apenas tradición futbolística, pero que esta vez se ha colado entre la élite mundial a nivel juvenil. Al margen de Australia o Corea del Sur, el resto de equipos presente en la cita holandesa tienen, en mayor o menor medida, una tradición en el deporte rey y defenderán hasta el máximo de sus posibilidades.
Serán precisamente Benin y Australia los que pongan el balón en marcha el viernes en la primera jornada del torneo en la sede de Kerkrade, en la que también se disputará el encuentro entre los anfitriones y Japón.
