HANNOVER.- Argentina jugará el miércoles frente a Brasil la final de la Copa Confederaciones, tras vencer a México por 6-5 en los lanzamientos penales, al acabar 1-1 los 120 minutos previos de un partido más táctico que espectacular.
Los 90 minutos concluyeron sin goles y con escasas ocasiones de gol por ambos bandos, pero con una tremenda batalla de ajedrez de los dos técnicos, Ricardo La Volpe por México y José Pekerman por Argentina. En la prórroga el "Tri" se adelantó con un gran tanto de Carlos Salcido, pero Luciano Figueroa empató pocos minutos después.
En los penales los dos equipos marcaron sus cinco lanzamientos. En la muerte súbita Germán Lux detuvo el disparo de Ricardo Osorio, y Esteban Cambiasso sentenció el pase a la final para servir el gran clásico con Brasil en Frankfurt. México, que se fue aplaudido por los 40.700 espectadores que asistieron al partido en Hannover, se medirá por el tercer puesto, también el miércoles, con Alemania en Leipzig.
Argentina saltó al campo con su esquema habitual, pero se encontró enfrente a un México diferente. Rafael Márquez, titular por primera vez tras su rotura muscular, se situó por delante de la defensa para construir el juego y sobre todo tapar a Juan Román Riquelme, el cerebro. Y Ramón Morales sustituyó a Fonseca en el ataque, en busca de más velocidad y movilidad.
La estrategia funcionó, porque México fue mejor en la primera parte. Márquez mando y dirigió, y Riquelme apenas apareció. El "Tri" dominó y tuvo ocasiones de gol, pero bien erró el remate, o bien se encontró con la acertada intervención de Lux. Así ocurrió en su mejor oportunidad, un disparo envenenado de Zinha desde el borde del área que el arquero de River Plate desvió al córner.
Argentina, portando brazaletes negros en homenaje a Emiliano Molina, el arquero de Independiente fallecido anoche, no pareció preocuparse por ser dominada, y siguió confiando en la habilidad de sus delanteros, especialmente de un activo Javier Saviola. La albiceleste llegó menos al arco, pero tuvo las oportunidades más claras.
En el minuto 19 el árbitro no vio una mano de Salcido dentro del área, y en el 44 Pineda sacó bajo palos un balón rematado por Juan Pablo Sorín tras una nueva gran jugada de Saviola.
Sólo los jugadores saben qué pasó en el descanso, pero en el segundo tiempo se invirtieron los papeles. Argentina decidió tomar el mando, y salió mucho más incisiva. En los primeros cinco minutos disparó tres veces a portería, casi más que en toda la primera parte.
México no se alteró, y se defendió con orden en busca del contraataque. En una de sus escasas ocasiones, Zinha estuvo a punto de abrir el marcador: recorrió toda la frontal buscan un hueco en el muro Argentino y soltó un zurdazo que se estrelló contra el poste de un Lux que ya se veía batido.
Pekerman vio que eran los momentos decisivos, y movió una ficha sustituyendo a Milito, un defensa, por Maxi Rodríguez, un delantero. El partido se iba a abrir y el gol podía llegar en cualquier momento, pero lo primero que sucedió fue un choque entre Coloccini y Morales que acabó con el mexicano sustituido con un corte en la ceja y un brazo dañado y con el argentino amonestado y objeto de las iras de todo el público mexicano y alemán.
Se había marchado del campo el autor del gol del triunfo de México ante la "albiceleste" en la Copa América 2004, pero sobre el campo quedaban muchos artilleros que ahora tenían más espacios. Lux sacó con la ayuda del poste un remate de Borgetti, y acto seguido Pablo Aimar, sustituto de un desaparecido Mario Santana, disparó alto desde el borde del área.
El choque agonizó sin que ninguno de los dos contendientes se volcase en busca del triunfo, lo que obligaba a la prórroga. Pero a la función aún le quedaban dos escenas importantes: las expulsiones de Saviola (minuto 90) y Márquez (minuto 92), los dos mejores jugadores de cada equipo.
El cambio de dama por dama benefició a Argentina, que aún tenía dos delanteros sobre el campo. México, por el contrario, había perdido a su líder, y La Volpe tuvo que quitar a Zinha y dar entrada a Gerardo Torrado para reequilibrar el equipo.
Todos los ingredientes estaban servidos para el drama, pero en la prórroga se mantuvo el juego táctico. Dominó Argentina y México se defendió con orden.
Sólo cabía esperar una genialidad, y llegó de Carlos Salcido, un central de 25 años de Chivas Guadalajara que apunta a un salto próximo a Europa. El defensa se incoporó con gran potencia al ataque, recogió el balón en los tres cuartos de cancha, dribló a Zanetti y Heinze y anotó de un disparo cruzado que tocó Coloccini, lo que despistó a Lux.
Argentina se volcó entonces a la desesperada, como inesperada. Primero Figueroa, a puerta vacía, remató flojo y a las manos del arquero Oswaldo Sánchez que se estaba levantando del suelo. Y después hizo lo mismo Sorín cuando intentó superar por alto a Sánchez.
La "albiceleste" no podía marcar con estilo, pero lo consiguió por la fuerza. Tras una serie de rechaces dentro del área, el balón le cayó a Figueroa, lo controló de taco, se revolvió y marcó de puntera, rodeado de contrarios y entre las piernas de Sánchez. Fue el cuarto gol en tres partidos para el artillero del Villarreal. Sólo quedaba el recurso de los penales, y la suerte le sonrió a Argentina.
Ficha del partido:
México: Oswaldo Sánchez; Gonzalo Pineda, Carlos Salcido, Ricardo Osorio, Mario Méndez; Rafael Márquez, Pavel Pardo, Jaime Lozano (56'Luis Pérez) Zinha (94'Gerardo Torrado), Ramón Morales (72'Alberto Medina); Jared Borgetti.
Argentina: Germán Lux; Frabrizio Coloccini, Gabriel Milito (66'Maxi Rodríguez), Gabriel Heinze; Javier Zanetti, Esteban Cambiasso, Juan Pablo Sorín, Mario Santana (76'Pablo Aimar), Juan Román Riquelme; Javier Saviola y Luciano Figueroa (116'Luciano Galletti).
Goles: 104'Carlos Salcido 1-0 y 110'Luciano Figueroa 1-1.
Árbitro: Roberto Rosetti (Italia).
Amarillas: Milito y Coloccini (ARG); Márquez, Pineda y Medina (MEX).
Expulsados: 90'Javier Saviola (ARG) y 92'Rafael Márquez (MEX).
