Esta era la filtración que se podía apreciar en una parte del techo del estadio. |
FRANCFORT, Alemania.— El moderno techo del estadio de Francfort resultó ser un fiasco hoy, al no poder contener la fuerza de la lluvia que cayó durante la final entre Argentina y Brasil por la Copa Confederaciones.
Ante el pronóstico de lluvia, el partido fue disputado bajo techo en el denominado Walstadion, la primera final de un torneo de la FIFA jugada en esas condiciones.
Pero el moderno techo retráctil no pudo ante la fuerza del aguacero, acompañado por relámpagos.
Cuando había transcurrido la primera media hora del partido, la lluvia empezó a colarse y caer bajo uno de los vértices para los saques de esquina, obligando a los fotógrafos apostados cerca a buscar otro sitio.
El estadio, repleto con más de 45.000 espectadores, costó aproximadamente 200 millones de dólares.