RIO DE JANEIRO.- El arbitro de fútbol brasileño Edilson Pereira de Carvalho no podrá dirigir de por vida, luego de que el lunes el máximo tribunal deportivo local lo hallara culpable por su participación en un escándalo relacionado con el arreglo de partidos.
Tras una audiencia en Rio de Janeiro, el tribunal compuesto por cinco hombres dijo que había encontrado unánimemente culpable a Carvalho de "dar o prometer dar una ventaja injusta influenciando en el resultado y actuando de una manera que socava la dignidad del deporte".
El arbitro -quien admitió en la televisión nacional haber aceptado dinero para manipular resultados de parte de un grupo que llevaba adelante apuestas ilegales- dirigió 11 partidos en el campeonato brasileño de este año. Todos han sido declarados nulos y volverán a jugarse.
Carvalho y Paulo Jose Danelon -otro árbitro, que dirigía partidos de la segunda división- fueron suspendidos el 24 de septiembre cuando el escándalo salió a la luz.
Carvalho pasó cinco díás detenido junto al empresario Nagib Fayad -quien formaría parte del grupo de apuestas ilegales-, mientras que Danelon admitió al ser interrogado que había arreglado tres partidos, recibiendo 4.400 dólares por cada uno.
Estas tres personas enfrentan acusaciones de fraude, conspiración, y delitos contra la economia.
A principio de mes, Carvalho contó en la televisora Globo: "Fui corrompido, me permití a mi mismo ser tomado por el dinero fácil (...) Lo hice porque quería. Fui seducido y estuve mal".
Reconoció también que se involucró porque tenía deudas.
La decisión del tribunal deportivo de hacer jugar los partidos arreglados nuevamente provocó el enojo de varios clubes, porque no está claro si Carvalho intentó o logró manipular cada partido que dirigió.
Los cuatro primeros partidos fueron disputados nuevamente la semana pasada, y todos terminaron con diferentes resultados a los jugados previamente.
Vasco da Gama dijo que pedirá volver a jugar por segunda vez su partido contra Figueirense por varios errores arbitrales. La semana pasada el encuentro finalizó 3-3, mientras que el primero había terminado con victoria de Vasco 2-1.
El jueves último, otro partido reprogramado fue suspendido a los 89 minutos cuando simpatizantes de Santos invadieron el campo de juego en su choque contra Corinthians, que vencía 3-2 tras haber perdido anteriormente 2-4.
