LA PAZ.- El Presidente de Bolivia Carlos Mesa recortará los salarios de altos cargos del Poder Ejecutivo en un 10% comenzando por el suyo dentro de un plan de austeridad que pondrá en marcha la próxima semana, se informó.
Se trata de un "ajuste de cinturones" para cubrir el alto déficit fiscal, dijo hoy el viceministro de Política Tributaria, José Luis Pérez.
"Con esta medida esperamos una disminución de por lo menos 300 millones de bolivianos, unos 38 millones de dólares, en el gasto corriente", aseguró Pérez.
El estado gasta anualmente poco más de 4.000 millones de bolivianos en salarios de los funcionarios públicos, unos 524 millones de dólares.
Actualmente, el Presidente gana 26.800 bolivianos, poco más de 3.500 dólares, con el recorte podría ganar unos 3.000 dólares. La rebaja afectará a ministros, viceministros, directores y superintendentes, se informó.
También los legisladores que ganan 26.000 bolivianos al mes, poco más de 3.000 dólares, analizan la posibilidad de un recorte en su presupuesto.
El presidente de la Cámara de Diputados, Oscar Arrien planteó la eliminación del salario a los suplentes de los legisladores que ganan la mitad de lo que cobra un titular.
El año pasado el estado logro ingresos por 9.600 millones de bolivianos, pero gastó 15.000 millones. El déficit fiscal que en 2003 cerró en 8% del PIB es, como dijo el propio presidente Mesa, el "agujero negro" de la finanzas públicas de Bolivia.
Al margen de la rebaja en los salarios el gobierno pretende incrementar el impuesto que pagan las petroleras y otros posibles ajustes impositivos para elevar los ingresos.
