La prensa italiana especula fuertemente con el nombre de Scola. |
ROMA.- El patriarca de Venecia, Angelo Scola, aparece como el favorito de los vaticanistas en torno a quién será el próximo papa. Según apuntan los diarios italianos, el cardenal es también el "papable" más nombrado por los aficionados a las apuestas y uno de los colaboradores predilectos de Juan Pablo II.
Las especulaciones en torno a la elección del italiano de 63 años se ven apoyadas por el hecho de que la sede episcopal en la ciudad de los canales y las góndolas trajo a la Iglesia católica tres papas tan sólo en el siglo pasado. Y no tres papas cualquiera: San Pío X (1903- 1914), Juan XXIII (1958-1963), iniciador del Concilio Vaticano II, y Juan Pablo I, quien pese a que sólo gobernó 33 días dejó con su humildad y su profunda sonrisa una honda huella entre los fieles.
"Los amigos que lo han visto con la camisa a cuadros color marrón de alpinista y después de profesor con la sotana negra, el fajín rojo de obispo y finalmente también con la vestimenta púrpura de cardenal, consideran que el blanco le quedaría bien", afirma el "Corriere de la Sera" en un artículo.
El italiano nació en Malgrate el 7 de noviembre de 1941 y es hijo de un camionero socialista y de un ama de casa. Según declaraciones que reproduce la prensa romana, está "orgulloso" de venir de una familia pobre. "Mi familia siempre vivió en un apartamentito de no más de 35 metros cuadrados en un viejo edificio de una fábrica donde había una pequeña habitación con una estufa que servía de cocina, salón y de todo. Después se pasaba a la habitación de mis padres y de ahí a un trastero en el que dormíamos mi hermano y yo", afirma.
Scola estudió Filosofía en la Universidad Católica de Milán. En 1970 fue ordenado sacerdote y se doctoró en Teología en la universidad alemana de Friburgo. Durante su época de estudiante se unió al movimiento espiritual Comunión y Liberación, considerado uno de los grupos más activos de la Iglesia católica.
Scola es considerado de tendencia moderada y al mismo tiempo muy próximo a Juan Pablo II. El fallecido Papa polaco lo nombró en 1995 rector de la Pontificia Universidad Lateranense de Roma y además lo designó también relator general del Sínodo de los Obispos convocado para el próximo octubre.
Expertos como el catedrático francés de Historia de la Iglesia Philippe Levillain consideran a Scola el primer favorito para la sucesión de Juan Pablo II, incluso por delante del arzobispo de Milán, Dioniggi Tettamanzi, de 71 años y otro de los principales candidatos papables.
"El sucesor de Juan Pablo II deberá tener personalidad, deberá hacer cosas importantes y dejarlas claras en los primeros cien días. La gente tiene grandes expectativas. Deberá ser un pontífice moderno y llevar a cabo cierta apertura, sobre todo en el terreno moral. Creo que no será un papa reaccionario, pero tampoco uno excesivamente moderno", dijo Levillain, considerando que dichas características se aplican a Scola.
La opción latinoamericana
Cuando queda apenas una semana para que comience el cónclave en el que se elegirá al sucesor de Juan Pablo II, persisten también las especulaciones acerca de que el próximo Papa podría ser de América Latina. Uno de los últimos cardenales en pronunciarse al respecto fue el primado de la Iglesia católica polaca, Josef Glemp.
Convencido de que el próximo papa no será polaco, el coterráneo de Karol Wojtyla considera que el sucesor debe venir de la región del mundo mejor representada entre los católicos del planeta y que por ello debe hablar español.
Entre los nombres citados con mayor frecuencia en la prensa italiana se encuentran el cardenal colombiano Darío Castrillón, el hondureño Oscar Andrés Rodríguez Maradiaga, el brasileño Claudio Hummes y el argentino Jorge Mario Bergoglio.
