EMOLTV

NASA estudia otro paseo espacial de astronautas del "Discovery"

La decisión se anunciará hoy tras el descubrimiento de nuevos trozos de material aislante que están desprendidos de la superficie del transbordador.

04 de Agosto de 2005 | 05:01 | EFE
Ver fotorama

Ver especial Vea infografía con los problemas


La especialista Wendy Lawrence y el piloto Jim Kelly trabajan en la estación Canadarm II en la Estación Espacial Internacional.
WASHINGTON.- La NASA decidirá hoy si dos de los astronautas del "Discovery" realizarán un cuarto paseo espacial para resolver el problema que plantea un trozo de aislante térmico desprendido junto a la ventanilla de la comandante Eileen Collins.

Esa decisión se tomará después de realizarse simulaciones de las condiciones que enfrentará ese material, de unos 40 centímetros de largo, cuando la nave reingrese el próximo lunes en la atmósfera terrestre a una velocidad de 22.000 kilómetros por hora.

Mientras tanto, su tripulación terminó hoy de transferir la carga a y desde la Estación Espacial Internacional. En la madrugada de hoy los astronautas estuvieron pasando a la estación tanta comida, agua y otros suministros como pudieron.

Según Wayne Hale, subdirector de los programas de transbordadores de la NASA, no se sabe qué podrá ocurrir cuando se produzca el choque molecular con la atmósfera.

"Podría desprenderse totalmente o podría desintegrarse", señaló ayer en una conferencia de prensa desde el Centro Espacial Kennedy en Cabo Cañaveral (Florida).

"En el peor de los casos, ese trozo podría golpear la nave y causar un daño estructural. A 22.000 kilómetros por hora la energía que acumula es considerable", señaló.


Detalle del trozo que preocupa a la NASA.
Contra el tiempo

"Tenemos a los expertos trabajando con este material. Aparte de eso estamos en buena forma" para el regreso. "No tenemos otras preocupaciones mayores de seguridad", manifestó

Paul Hill, director de vuelos de la NASA, señaló que las simulaciones se realizarán en túneles de viento donde un trozo similar reproducirá las condiciones del violento contacto de la nave con la atmósfera.

Según fuentes de la agencia espacial, a partir de ese momento se determinará si se realiza la cuarta actividad extravehicular de los astronautas Steve Robinson y Soichi Noguchi, de la Agencia de Exploración Espacial de Japón, la cual podría realizarse mañana, viernes.

"Pero, en realidad, estoy apostando por que no será necesaria", señaló Hale.

El trozo de material aislante aparentemente se desprendió parcialmente de la cubierta de la nave durante el lanzamiento, el martes de la semana pasada.

El nuevo problema fue confirmado después de que la NASA celebrara la operación en la que Robinson eliminó dos protuberancias aparecidas en el caso inferior de la nave.

Los ingenieros de la agencia espacial temían que esas deformaciones de fibra y cerámica que separan las losetas de protección termal pudieran convertirse en una problema de seguridad en el reingreso del "Discovery".

Reparación sin precedentes

El trabajo realizado por Robinson, asido al extremo del brazo robótico de la nave, no tenía precedentes en los 28 años de historia de los transbordadores, pues nunca un astronauta se había ubicado en la panza del transbordador espacial.

También fue la primera vez que se realizó un trabajo de reparación en pleno vuelo.

Los expertos de la NASA temían que la protuberancias presentaran resistencia y hasta se habían planteado la posibilidad de utilizar fórceps, tijeras y hasta cinta adhesiva para eliminarlas.

Sin embargo, el trabajo resultó mucho más fácil de lo que se pensaba.

Robinson extendió su mano enguantada sobre la cubierta de la nave y tiró de la primera protuberancia.

"Está saliendo... con mucha facilidad", señaló antes de flotar hacia la segunda, que tampoco ofreció resistencia.

Según Hill, el suspiró de alivio se sintió "en todo el edificio" del control de la misión en el Centro Espacial Johnson, en Houston (Texas), cuando desapareció la primera protuberancia.

"Y cuando se eliminó la segunda, el alivio fue todavía mayor" y a partir de ese momento lo que queda por resolver antes del regreso son dificultades menores, dijo.

El buen estado de los más de 25.000 paneles de aislante térmico del transbordador se convirtió en una preocupación crucial para la NASA tras la tragedia del "Columbia", el 1 de febrero de 2003.

Uno de esos paneles, que recubría el tanque externo de la nave, se desprendió e impactó contra el ala izquierda de la nave.

El golpe perforó el metal y a través de él entraron los gases candentes en el reingreso a la atmósfera, que desintegraron la nave. En esa catástrofe, que paralizó las misiones de los transbordadores estadounidenses, perecieron los siete tripulantes del "Columbia".
EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?