PARÍS.- La fuerte tormenta que se abatió el pasado fin de semana sobre el sur de Francia dejó ocho muertos, según nuevas cifras oficiales difundidas hoy.
Cuatro de los ocho muertos perdieron la vida por inhalación de monóxido de carbono emitido por aparatos de calefacción defectuosos encendidos tras la caída del sistema de calefacción central.
Por tercer día consecutivo, 680.000 familias estaban sin electricidad este lunes, mientras que otros cientos de miles se han quedado sin agua y conexión telefónica.
En varios departamentos del sur de Francia permanecieron cerradas todas las escuelas este lunes. El gobierno movilizó al Ejército para que ayude en las labores de limpieza. La red ferroviaria sufrió graves daños en una extensión de 1.500 kilómetros, informó el presidente de la compañía nacional de ferrocarriles, Guillaume Pépy.
