SANTIAGO.- Si bien se espera que durante esta jornada los 309 chilenos que se quedaron aislados en Machu Picchu puedan ser rescatados, las inclemencias climáticas han dificultado la entrega de ayuda y alimentación a los dos mil turistas extranjeros que quedaron aislados.
"Están habiendo bastantes problemas a causa de lluvias intermitentes, que duran varias horas. El tren que va a Machu Picchu se ha visto interrumpido por lo que un buen tramo de la línea férrea está interrumpido. Se han quedado más de mil turistas varados y la ración de los alimentos está escaseando", indicó a Emol vía telefónica Alberto Rivas, arquitecto de la Defensa Civil del Cusco.
Rivas explicó que la situación en el país vecino continúa siendo compleja, puesto que, donde las casas son de adobe y los terrenos tiene complicaciones, el colapso de los caminos es "inminente".
Según información entregada por la Cancillería los connacionales, se encuentran en buenas condiciones de salud y estarían alojando en colegios, hoteles y casas de la zona, mientras se logra reanudar el ferrocarril, que está suspendido por las fuertes lluvias.
La mayoría de los chilenos que están aislados en el Cusco se trataría de personas jóvenes, por lo tanto, serían los últimos en abandonar el lugar, ya que las autoridades peruanas decidieron desalojar a ancianos y niños, como prioridad.
Durante esta jornada se espera que cuatro helicópteros puedan retirar a los extranjeros que se encuentran varados en la zona.