El economista y ex presidente del Banco Central, Rodrigo Vergara, participó este martes de un seminario organizado por el Instituto Chileno de Derecho Tributario, en el cual analizó el proyecto que busca establecer un impuesto a los denominados "súper ricos" del país, y expuso sus reparos a la iniciativa.
El proyecto, presentado por parlamentarios de oposición, está siendo discutido en la comisión de Constitución de la Cámara de Diputados, y busca concretar una modificación constitucional para gravar por única vez con un 2,5% los patrimonios brutos superiores a US$22 millones.
Según expuso Vergara, la discusión de imponer un impuesto a los segmentos de mayores ingresos "cada vez se ha hecho más significativa en el mundo, no es una cosa chilena, y de hecho partió mucho antes". Dicho eso, dio cuenta de los argumentos a favor y en contra que se han dado en medio del debate, y aseguró que su posición en la materia "es más bien negativa, no por el objetivo que persigue, que me parece muy razonable, sino porque la evidencia muestra que funciona bastante mal".
Así, entre los mayores problemas que, según el doctor en economía de la U. de Harvard, tendría implementar una medida como esa, dice relación con una posible fuga de capitales, que es "una de las razones principales por las cuales los países han eliminado este impuesto", junto con su supuesto alto costo de administración e implementación, lo que no se condice con la baja recaudación que este impuesto tendría.
"El impuesto a la riqueza tiene una recaudación extraordinariamente baja, no así otros impuestos", sostuvo, citando el ejemplo de algunos países que lo han implementado, como Dinamarca, Finlandia, Francia, Alemania, España, Noruega o Suiza, afirmando que entre 1990 y 2018, el año en que esos territorios recaudaron más con ese gravamen fluctuó entre 0,1% y 1% del PIB. Razón, subrayó, por la cual varios de esos países han derogado la medida.
El proyecto en Chile continuó, "espera recaudar 2,3% a 2,4% del PIB. Si recaudamos eso, y ahí un poco mi escepticismo, seríamos récord mundial. El número uno del 'Chino' (Marcelo Ríos) en el año 98' sería nada alado de esto. Seríamos muy superiores, el doble prácticamente, de lo que ha recaudado el mayor país en un año en específico".
"Por eso es que me cuesta mucho y soy muy escéptico respecto a estas cifras que se dan en relación a la posibilidad de recaudación de este impuesto en el caso chileno. Y más aún, si hacemos esto por punto porcentual, porque a veces uno podría decir que en Chile la tasa va a ser 2,5% y en otros países la tasa es menor, hagámoslo por punto porcentual, cuánto recauda por cada punto el impuesto, y de nuevo Chile sería récord mundial comparado con lo máximo que recaudaron esos países durante los últimos casi 30 años", añadió.
"El proyecto espera recaudar 2,3% a 2,4% del PIB. Si recaudamos eso, y ahí un poco mi escepticismo, seríamos récord mundial. El número uno del 'Chino' (Marcelo Ríos) en el año 98' sería nada alado de esto. Seríamos muy superiores, el doble prácticamente, de lo que ha recaudado el mayor país en un año en específico".
Rodrigo Vergara
Dicho eso, concluyó que el impuesto a los "súper ricos" es "difícil de implementar, la recaudación es baja y tiene elevados costos potenciales. Por lo mismo, mi conclusión es que el impuesto a la riqueza no parece ser la mejor herramienta para buscar esa mayor igualdad o progresividad que creo que son objetivos razonables. Hay otras opciones, como el impuesto a las ganancias de capital (...), creo que también se le puede dar mayor progresividad al tema del impuesto a las personas".
La visión de Ramón López: "No soy fan, pero funciona"
Por otro lado, el académico de la facultad de Economía y Negocios de la U. de Chile y quien también participó del seminario, Ramón López, expuso una visión contraria a la de Vergara y, aseguró, sin ser "fan" del proyecto que está en el Congreso, que "esta no es la primera vez que se plantea e implementa un impuesto a las grandes fortunas. El Gobierno de Eduardo Frei Montalva empezó con un impuesto en Chile que, de acuerdo a algunos antecedentes que tenemos, aparentemente funcionó y bastante bien".
"Estos impuestos existen y están activos en ocho países OCDE, más Uruguay que no es OCDE. La recaudación fluctúa bastante entre países, entre 0,2% del PIB y 1,3% del PIB. En general son impuestos bajos, que aplican tasas mucho más bajas que propone el Congreso", dijo, destacando que el proyecto en Chile tiene "un umbral de US$22 millones, que significa que no afecta a la clase media y afecta a muy poca gente, alrededor de 1.500 personas, y eso es una virtud".
"Yo no soy un fan del proyecto del Congreso mientras no se arreglen algunas cosas técnicas que son problemáticas, pero el hecho de que afecte a muy poca gente significa que es mucho más fácil fiscalizarlo", apuntó López, criticando eso sí que dicha iniciativa sea un gravamen sobre patrimonio bruto, "hay hay un gran problema, no se pueden aplicar estos impuestos sobre riqueza bruta, tiene que ser sobre riqueza neta y eso espero que lo cambien".
De todas formas, recalcó "si se implementan y diseñan bien, estos impuestos recaudan y recaudan bien. Eso hemos aprendido de la experiencia internacional". Además, negó que los países que aplican este impuesto recauden poco con él, afirmando que el royalty minero recauda 0,1% del PIB en Chile, lo que no significa que se tenga que eliminar. Sí, en todo caso, mostró sus dudas respecto a que la recaudación alcance el nivel que señala el proyecto.
