¿Tienes hogar? La misión del año es construirlo y esto no es necesariamente una casa, sino desarrollar tu espacio emocional, tu nido, tu pertenencia; sentir que tienes lazos afectivos importantes. Podrás cultivar las relaciones de pareja y de familia de una forma más sólida, pues se pueden dar uniones de destino que te insten a tomar decisiones concretas: ¿comprometerse, casarse, tener hijos, hacer las paces con la familia, liberarse de relaciones tóxicas? No importa qué elijas, el tema será que podrás atravesar un portal que te conduzca hacia el amor puro. De ti depende.

Habrá definiciones importantes: renuncias, despidos, contrataciones. Atención con las figuras de autoridad porque sigue delicado el trato con ellas. Los astros quieren que te renueves, por lo tanto puedes pagar caro aferrarte -por miedo o comodidad- a una actividad insana o que no disfrutas. Conéctate con tus prioridades en esta área, ya que si agarras la energía expansiva del año podrás disfrutar de buenas oportunidades, viajes, estudios, proyectos, sociedades, creatividad y generosos dividendos. ¡Adelante!

No importa la edad que tengas, ojo con las rabias, la ansiedad y la rigidez; éstas pueden desencadenar problemas al hígado, dolores de cabeza y temas con los huesos, respectivamente. Anda a paso lento y podrás descubrir más regalos para tu vida. Habrá una gran apertura de temas espirituales y la posibilidad de practicar disciplinas que te centren. Bien por el yoga y las caminatas.

Muévete más allá de lo conocido, pero no desde la tentación por lo nuevo, sino desde un propósito de ampliar tu mundo y de beneficiar a otros también. Desarrolla proyectos con flexibilidad. No mires tu ombligo, mira el horizonte y siente: ¿Qué tienes que hacer, qué quieres?

Ríete de ti mismo y ve humor en todas las cosas.