Como buena niña bautista, la pequeña Britney cantaba en el coro de la iglesia. Esos primeros pasos más su idolatría por la reina del pop, Madonna, fueron marcando su vocación por la música.
Aprendió a hablar a muy temprana edad y ya a los seis años hizo su “primera presentación pública" , imitando a Michael Jackson y su baile hacia atrás en un acto escolar. No era una muy buena estudiante, pero sí una gran gimnasta y sus padres se esforzaron por cumplir sus sueños, manejando todos los días más de una hora para llevarla a sus clases de gimnasia, en las que destacaba en los ejercicios de suelo. Entrenaba más de tres horas diarias, pero no cedía en su empeño, que la hizo sobresalir en este deporte y ganar todos los trofeos estatales de su categoría.
Cuando tenía 8 años se integró a un grupo de danza, incorporando el baile y el canto a sus actividades. Empezó a viajar por el estado, compitiendo en grupo e individuales y, aunque no ganaba siempre, quedaba en muy buenas posiciones.
Estando de gira, viajó con su madre a Atlanta y participó en una prueba para el programa de televisión The Mickey Mouse Club de Disney Channel; aunque quedó entre las finalistas, la rechazaron por ser demasiado pequeña. Pero si la edad estaba en su contra, el talento no pasó desapercibido para un productor, quien puso a su madre Lynne en contacto con un representante artístico en Nueva York.
Ese mismo verano, Britney y su madre viajaron a esa ciudad, donde la pequeña fue inscrita en el Profesional Performing Arts School, al que regresó los tres veranos siguientes, hasta que cumplió los 11 años y pudo presentarse a otra prueba para Mickey Mouse Club.
La segunda vez fue definitiva y Britney tuvo que viajar sola a Orlando, Florida, donde vivía en una residencia con otros 200 protagonistas del show, entre los que se encontraban Christina Aguilera y Justin Timberlake, del quinteto juvenil *NSYNC.
Desde los 11 hasta los 14 años repartió su tiempo entre la escuela, las grabaciones para el programa y los viajes de Florida a su casa en Kentwood. Participó de dos temporadas, pero la tercera se canceló, así que la pequeña presentadora decidió abandonar Disney y volver a su pueblo, pero con la firme intención de dedicarse a la música.