Pitazo final en el estadio Santa Laura y el rostro de Ariel Holan lo dice todo. Empate amargo de la UC ante Colo Colo. Jugó todo un tiempo con un futbolista más, pero aún así no pudo con su rival.
El público hace sentir su molestia. Son varios los gritos de desaprobación desde la tribuna para el DT. La voz de los hinchas también es clara. "Jugamos a nada", "hicimos un pésimo partido". "Holan está perdiendo y se le acaba el crédito", lapidan.
La cara del técnico argentino refleja la amargura por el resultado. Y también hay una imagen que es aún más contundente de lo que pasa. Apenas el juez Cristián Garay sentencia el final, el estratega se marcha totalmente solo y con la cabeza baja.
Camina por el costado de la cancha, se despide de Gustavo Quinteros con un abrazo y emprende camino al vestuario. Solo. Absolutamente solo. Sin conversar ni saludar a ningún jugador. Ni tampoco acompañado de algún colaborador.
La imagen no es una imagen cualquiera porque al mismo tiempo sus futbolistas caminan rumbo al sector sur del estadio, saludando a rivales y a los hinchas. Mientras, Quinteros se queda en el campo dialogando y esperando para hablar con la transmisión oficial.
Ese transitar rumbo al vestuario lo hace mirando el césped y ante algunas pifias que caen desde la tribuna.
El momento es complejo y Holan lo sabe. Su equipo no pudo ganarle a Colo Colo, pese a jugar con uno más todo el segundo tiempo. Y si bien se mantiene arriba en la tabla, el presente solo cosecha dudas y más dudas.
De los últimos cinco partidos, la UC solo venció a Deportes Colina. Fue en penales por Copa Chile y tras evitar el bochorno con un gol en la agonía. Antes ya había quedado eliminado en primera ronda de la Sudamericana a manos de Audax Italiano. Por el Torneo, el saldo es de tres empates en los últimos tres encuentros.
Se suman los rumores de líos en el camarín con jugadores que no estarían cómodos con el DT. Pese a que ambas partes lo niegan, el ruido ya está instalado hace un rato y por ahora las aguas no se tranquilizan.