El Real Madrid venció de visita 1-0 al Alavés este domingo y sigue a cuatro puntos del líder Barcelona en la Liga española.
Fue un partido muy difícil para el equipo merengue. A los 34' abrió la cuenta con un golazo de Eduardo Camavinga, pero solo cuatro minutos despúés Kylian Mbappé fue expulsado.
El francés, molesto después de que no le cobraran una falta, fue con mucha vehemencia a disputar el balón con Antonio Blanco y le terminó dando una fuerte patada en la tibia.
En primera instancia, el árbitro César Soto Grado le mostró amarilla al campeón del mundo. Sin embargo, hubo llamado del VAR, el juez fue a revisar la jugada y optó por cambiar su decisión. Mandó a las duchas a Mbappé.
Tras el encuentro, el ex PSG buscó a Blanco para pedirle perdón y preguntarle cómo estaba. Además, se disculpó con sus compañeros por dejar al equipo en inferioridad numérica.
En el acta del árbitro, se estableció: "En el minuto 38 el jugador (9) Mbappe Lottin, Kylian fue expulsado por el siguiente motivo: Por entrar con el pie en forma de plancha a la altura de la espinilla de un contrario, en la disputa del balón, usando fuerza excesiva".
El galo arriesga hasta cuatro partidos de sanción.
Fuerte cántico contra Asencio
El encuentro disputado en el estadio de Mendizorroza tuvo una polémica extrafutbolística. Hubo fuertes insultos contra Raúl Asencio, defensor del Real Madrid.
Asencio está imputado por la presunta difusión de pornografía infantil. Varios compañeros suyos en la cantera del merengue viajaron a Canarias y allá mantuvieron relaciones sexuales con dos chicas, una de ellas menor de edad. De acuerdo al medio El Confidencial, las grabaron sin su consentimiento. Asencio habría tenido acceso a esas imágenes y se las habría mostrado a una tercera persona.
"Real Madrid, protectores de los agresores" o "fuera de aquí", decían los panfletos que la hinchada del Alavés dejó en las inmediaciones del estadio. Al interior del recinto también se manifestaron.
"Asencio, muérete", "Asencio, escoria, fuera de Vitoria", se escuchó varias veces. Recién a los 78' el árbitro Soto Grado activó el protocolo contra el odio y el partido estuvo detenido unos minutos.
Las cámaras de Movistar+ captaron la reacción del central. "No pasa nada, dale", manifestó. No es la primera vez que vive una situación así con fanáticos de otros equipos.
El Alavés se expresó en redes sociales y escribió: "El Deportivo Alavés rechaza y condena cualquier forma de violencia, racista o xenófoba en el deporte".
Davide Ancelotti, hijo de Carlo y segundo entrenador del Real Madrid, se presentó en conferencia de prensa y habló del tema.
"Es decepcionante a nivel de sociedad lo que está pasando, pero en el campo tenemos que competir, no somos nosotros los que tenemos que tomar medidas, todo el mundo espera que no pase, pero... es bastante decepcionante a nivel de sociedad y es lo que hay. Es el árbitro el que tiene que activar el protocolo", manifestó.