SANTIAGO.- Todo se destapó en agosto de 2016 cuando la Fiscalía Nacional Económica (FNE) presentó ante el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) un requerimiento contra Laboratorio Biosano, Fresenius Kabi Chile y su filial Laboratorio Sanderson. ¿La razón? La FNE acusó a las empresas de formar y mantener, por más de una década, un cartel para afectar licitaciones convocadas por el Estado de Chile para adquirir ampollas.
Biosano es un laboratorio nacional que opera hace más de 75 años en el mercado de inyectables. Fresenius Kabi Chile y Sanderson son filiales del conglomerado farmacéutico transnacional de origen alemán Fresenius Kabi. Y todos ellos son los únicos fabricantes de ampollas del país, las que son utilizadas para tratar una amplia gama de patologías y constituyen un insumo básico en cualquier establecimiento de salud.
Así, el principal comprador de este tipo de medicamentos, la Central de Abastecimiento del Sistema Nacional de Servicios de Salud (Cenabast) -que agrupa la demanda de medicamentos del sector público- se vio perjudicado desde 1993 por el actuar de las compañías, las que afectaron las compras públicas de 93 fármacos inyectables.
La colusión
Tal como señaló el Consejo de Defensa del Estado (CDE) en su querella por estafa dada a conocer ayer, los laboratorios "acordaban cuál de ellos ofertaría al menor precio en licitaciones para adquirir medicamentos inyectables genéricos contenidos en envases de menor volumen, respecto de los que podrían haber competido, buscando determinar quién proveería estos medicamentos".
Así, según la acusación previa, hecha por la FNE, "antes de ofertar en las licitaciones de Cenabast, los laboratorios definían cuál de ellos debía adjudicarse los medicamentos por los que podrían haber competido".
De esta forma, el cartel, que se extendió entre 1999 y el primer semestre de 2013, operaba acordando precios de referencia para sus ofertas y determinando quién presentaría la propuesta ganadora. En dicho periodo, Cenabast requirió más de un millar de veces los medicamentos comprendidos en la colusión.
US$17 millones es la multa solicitada por la Fiscalía
Con esto, las empresas acusadas por la colusión, obtuvieron "millonarias ganancias" y lograron la concentración de un 85% del mercado en un periodo de cuatro años.
Es por ello que la Fiscalía solicitó una multa de 18.000 Unidades Tributarias Anuales (UTA) para Sanderson y 2.000 UTA para Fresenius Kabi Chile, lo que equivale a un total de casi US$17 millones. Sin embargo, la FNE no pidió multa para Biosano, por haber accedido al beneficio de delación compensada.
El beneficio del Laboratorio Biosano
Este jueves, luego de que el CDE anunciara que se querelló por estafa contra los laboratorios involucrados, A través de una declaración pública, Biosano indicó que "ha cooperado desde el inicio en este caso, en todas las sedes, y ésta no es la excepción".
"En este contexto, desde hace un tiempo iniciamos conversaciones con el CDE, ya que nuestro propósito es compensar el potencial impacto que la conducta del laboratorio pudo haber ocasionado a la Cenabast. Para ello, ya ingresamos una propuesta de acuerdo al CDE", agregó el laboratorio.
Cabe destacar que la investigación de la FNE se inició el 2012 a partir de denuncias de la Contraloría General de la República y del Ministerio de Salud. La evidencia del caso fue obtenida en diligencias de entrada, registro e incautación, así como de interceptación y registro de comunicaciones. La acción presentada ante el TDLC también se funda en elementos de prueba aportados por Biosano, que se acogió durante la investigación al beneficio de delación compensada.
Ahora, con la denuncia del CDE, el Ministerio Público determinará si hubo fraude al Fisco de parte de los ejecutivos Pedro Pablo Echeverría Bascuñán, de Fresenius Kabi Chile; Mariano Ojeda Martínez, de Sanderson; y los hermanos Claudio Reginato Vásquez y Maurizio Reginato Vásquez, de Biosano.