SANTIAGO.- Hace cinco años, Paula Ovalle comenzó a vender huevos de "gallinas felices" en su negocio de venta y reparto a domicilio La Feria Delivery. Así, aunque el precio es más del doble que los huevos tradicionales, la emprendedora chilena recalca que sus ventas han aumentado más de un 60% y que, de hecho, "ya es muy raro que me encarguen bandejas de los otros".
Si bien para Ovalle es el claro efecto de una "revolución consciente" en cuanto a la alimentación saludable y sustentable, en Chile sólo el 1% de los huevos que se consumen son efectivamente de gallinas libres. Algo muy diferente a lo que ocurrirá en Francia, donde acaba de decretarse que para el 2022 "todos los huevos frescos procederán de gallinas que vivan al aire libre y no en jaulas".
Considerando el aumento en la demanda de los huevos que vende Ovalle y la aparente tendencia de los consumidores de estar optando por este tipo de huevos, Emol consultó a los principales actores del mercado sobre la decisión de Francia, el negocio y la verdadera posibilidad de que Chile reconvierta su industria.
El aumento en la demanda
"Las ventas no paran, están en constante aumento. Si hablamos del retail, en seis años las ventas se han cuadriplicado", contó a Emol, el dueño y fundador de Gallina Feliz, Renato Maino.
Así, aunque hay cinco veces más productores de huevos tradicionales, Maino comentó que "algo como lo de Francia, de gallinas sin jaulas, no es algo imposible de creer para Chile... pero como para 2035". En ese sentido, enfatizó que si bien la industria está explorando desarrollar nuevas líneas de gallinas libres, "jamás va a eliminar su producción normal".
$3.500 valor promedio de una bandeja de 12 huevos de gallina libre
Para Maino la razón es principalmente una: el costo. Sucede que para poder mantener las 20.000 gallinas de su granja, necesita una hectárea cada 3.000 aves, por lo que, sumado a otros gastos, su costo de producción por huevo es casi el doble que el de una gallina enjaulada.
En ese sentido, cabe destacar que hay distintos tipos de sistemas en los que pueden vivir las gallinas ponedoras: jaulas (en las que deberían tener 460 cm2 cada una); jaulas enriquecidas (jaulas más grandes);"free cage" (gallinas sin jaulas conviviendo todas juntas dentro de un gran galpón llamado aviario); "free range" (al aire libre). En el caso de la Gallina Feliz, éstas viven en un aviario y en las tardes les abren las puertas hacia las praderas.
$1.900 valor promedio de una bandeja de 12 huevos blancos tradicionales
Pablo Albarán, gerente general y fundador de Ecoterra, empresa galardonada a nivel internacional, señaló a Emol que los huevos que produce han visto un aumento en la demanda de 10% anual desde que fundó la compañía en 2011.
Para él, al igual que para Maino, "si Chile se adaptara y todos los productores convergieran en la misma línea, podríamos llegar a algo como lo de Francia para 2032". Sin embargo, recalcó que "se trata de una inversión tremenda" que aún no se condice con lo que los consumidores prefieren a la hora de comprar.
El álgido debate en torno al bienestar animal
"Nosotros vendemos un proceso más que un producto (...) el bienestar animal no se traduce en el huevo directamente, pero sí se traduce en cómo los humanos respetamos a los animales con los que trabajamos para producir alimentos", dijo enfático Albarán respecto al mercado.
En ese sentido, describió: "Una gallina enjaulada vive como en una hoja de tamaño carta, no se puede parar, no ve la luz del sol, está parada sobre una reja toda su vida, se le encorvan los dedos, se le rompen los huesos porque no tiene movimientos y no crea musculatura, es algo macabro".
"Esto no es solamente una gallina 'feliz'. Es una obligación, es el mínimo que tenemos que hacer como sociedad. No es una cuestión para los animalistas, no es para gente hippie, esto es tener a los animales con el mínimo de lo que se merecen"
Pablo Albarán
Sin embargo, respecto a su propia industria también indicó: "En nuestro caso siguen siendo animales productivos, no es que estén perdidas en el bosque y las jubilemos a cierta edad, no. Es una vida productiva pero respetando los mínimos estándares de bienestar: que puedan poner un huevo en un nido protegido, que duerman en una percha (palo), que se den sus baños de arena, que se asoleen, que corran, que aleteen".
Desde el otro lado de la industria, el gerente general de la Asociación de Productores de Huevos (ChileHuevos), Patricio Kurte, subrayó a Emol que "todas las opciones para producir huevos son igualmente válidas, no es que una cosa sea correcta y la otra no, hay distintos sistemas de producción y cada uno de ellos tiene desafíos distintos para ser amistosos con el bienestar animal".
En ese sentido, aseguró que "el bienestar de las gallinas, en general, está mejor resguardado en la producción confinada en jaulas, excepto por la situación de libertad de movimiento. Una gallina que está en una jaula no puede extender sus alas, eso es cierto y correcto, el punto está en qué tan relevante es para el consumidor que eso ocurra o no ocurra. La gallina no se va a morir, no se va a enfermar, no va a estar triste", afirmó Kurte.
"Hay algunos que creen que es súper relevante que la gallina tenga un espacio gigante, pero hay que escuchar a los auténticos científicos y los científicos que estudian bienestar animal de gallinas, cerdos y vacas, tienen parámetros objetivos para ver si un animal está en condiciones de bienestar o no. El tema del espacio es una variable, pero hay muchas otras"
Patricio Kurte
"Hay un problema de asimilar esto a la humanidad. Típico que dicen: 'Oye cómo te sentirías tú si estuvieras encerrado con 5 personas más en una jaula' y la verdad es que eso es una humanización de la producción animal".
Además, en un comunicado desde el gremio aseguraron que "las características fisicoquímicas y el valor nutricional de los huevos producidos, tanto por los sistemas tradicionales como por los alternativos, son esencialmente los mismos". Algo que Kurte respaldó y agregó: "Son potencialmente igual de buenos (...) porque esencialmente son lo mismo".
La reconversión de la industria
Si efectivamente se pretendiera llegar a algo como lo de Francia, los productores de huevos tradicionales -que representan más del 98% de la producción nacional- deberían reconvertir totalmente su negocio. Ante ello, desde La Granja "Gallinas Libres" señalaron a Emol que "el costo de inversión que debe asumir un productor para reconvertirse a un sistema de producción libre de jaula, sería tres veces mayor al sistema de producción tradicional".
Lo anterior, "significa que el costo estimado de reconvertir la industria a un sistema libre de jaula sería de $225.000 millones aproximadamente". Dicho gasto, "impactaría a la oferta y, por ende, el precio, lo que afectaría directamente al consumidor".
$225 mil millones costaría pasar a una industria libre de jaulas
Sin embargo, empresas tradicionales ya están explorando vetas sin jaulas. Es el caso de Huevos Coliumo que desde hace 55 años produce cerca de 360.000 huevos tradicionales al día, pero a partir del mes de junio iniciará su venta de huevos La Castellana, todos producidos por gallinas dentro del sistema "cage free" (sin jaula, en aviarios).
María Jesús Errázuriz, subgerente de Administración y Desarrollo de la empresa, contó a Emol que producirán 30.000 huevos por día gracias a 32.000 gallinas que tendrán la posibilidad de hacerse baños de arena, dormir en perchas, tener nidos y vivir en un espacio estimado de 9 gallinas por metro cuadrado. Además de contar con un sistema 100% abastecido con energía solar.
"Una reconversión acelerada, sin considerar la realidad del mercado chileno, podría dejar sin acceso a consumir huevo a una parte importante de la población, porque habría menos cantidad a un mayor precio"
La Granja
"
Claramente Chile debiera ir en esta dirección, pero la velocidad en la que avanza depende 100% del contexto económico", comentó Errázuriz y explicó que, a pesar de que uno ve el aumento del interés de las personas por el bienestar animal, "
al momento de comprar, por un tema de bolsillo, siguen prefiriendo el huevo tradicional".
