Desde que comenzó a expandirse, el nuevo
coronavirus ha traído consigo múltiples consecuencias para los mercados internacionales. La decisión de las autoridades chinas de extender las vacaciones para frenar su avance paralizó el trabajo en los puertos, lo que mantiene a miles de productos varados en sus costas. Entre ellos, cerca de
1.500 contenedores con fruta fresca chilena.
Debido a esto, diversos gremios exportadores han expresado su preocupación por los alcances del virus y por los perjuicios que podría provocar en el comercio, sobre todo considerando la importancia que tiene el mercado chino para nuestro país.
Fue por esta situación que desde el Gobierno convocaron a una mesa de trabajo para este viernes, con el objetivo de buscar la forma de mitigar los efectos que el coronavirus podría causar en el ingreso de productos al gigante asiático.
La cita se realizará durante la mañana y culminará cerca de mediodía, donde participarán los ministros de Relaciones Exteriores (s), Rodrigo Yáñez, el ministro de Hacienda (s), Francisco Moreno, y el ministro de Economía, Fomento y Turismo, Lucas Palacios, junto a los representantes de los gremios exportadores.
Asimismo, en el encuentro -que se llevará a cabo en la sede de la Cancillería- estarán presentes autoridades de ProChile, Servicio Nacional de Aduanas, Servicio Agrícola y Ganadero, ODEPA y Sernapesca.
Según explicó Yáñez a T13 Radio, la idea de la mesa "es revisar justamente con el sector exportador la situación y el estado de esos envíos para poder armar un plan de acción conjunto que nos permita reaccionar de manera rápida".
"Hay cosas que nosotros no podemos manejar, pero sí dentro de lo que podemos hacer es mitigar todo lo posible, observar y estar muy pendiente de todas las variables que tienen que ver con esta situación, no solamente con el tema del comercio, sino que también desde el punto de vista de los chilenos que se encuentran o que están de paso por China", agregó el ministro subrogante.
Hasta ahora, la postura del Gobierno había sido la de llamar a la calma al mundo empresarial, confiando en que el problema podría comenzar a solucionarse la próxima semana, cuando acaben las vacaciones del Año Nuevo chino.
No obstante, durante la cita también se evaluará la posibilidad de que los inconvenientes persistan, por lo que desde el Ejecutivo ya prometieron ayudar en las gestiones para redireccionar a otros mercados de los contenedores que van rumbo a China.
