Este martes UnitedHealth Group (UHG), el mayor conglomerado de salud en el mundo, anunció su intención de vender sus negocios en Chile y Sudamérica. La noticia sorprendió, debido a que en nuestro país el grupo norteamericano opera las Isapres Banmédica y Vida Tres; y las clínicas Santa María, Dávila, Vespucio, Ciudad del Mar y Biobío; además de otras instituciones de salud e inmobiliarias.
En concreto, se trata del mayor grupo ligado al sector de la salud en Chile.
También llamó la atención por el poco tiempo que alcanzó a estar UHG en el país. El conglomerado tomó el control de Empresas Banmédica a comienzos de 2018, tras comprárselo al Grupo Penta por US$2.800 millones. Este se venía deshaciendo de sus activos tras el escándalo por financiamiento ilegal de campañas políticas.
En adelante, tuvieron que enfrentar una serie de "turbulencias" que, sumadas a los problemas en otros países, derivaron en la decisión de dejar el país y la región.
Los resultados del segundo trimestre dan cuenta de la situación: pérdidas por US$1.300 millones en Sudamérica, de los cuales US$220 millones se atribuyen a Chile.
La operación en la región, en todo caso, no es de grandes cifras para el conglomerado. Según números recogidos por La Tercera, en 2023 UHG logró ventas por US$371.600 millones, mientras que empresas Banmédica alcanzó los US$ 2.827 millones. Esto equivale al 0,8% de los ingresos.
El fallo GES y la Ley Corta
Apenas instalados, UHG se encontró con dos dictámenes de la justicia en contra de las Isapres Banmédica y Vida Tres: el fallo GES y el fallo por tabla única de factores, que obligaba a devolver cobros en exceso.
El dictamen por GES anuló las alzas que las Isapres habían comenzado a aplicar a partir de octubre de 2022. Esto obligó a las aseguradoras a volver a los precios del periodo 2019-2022, lo que implicó una caída de 12% en sus ingresos.
El fallo por tabla única de factores, en tanto, derivó en la Ley Corta de Isapres, que mandata al sistema a devolver un total de US$1.200 millones cobrados en exceso a los afiliados, en un plazo no mayor a 13 años. Además, estipula que las aseguradoras no podrán retirar utilidades mientras está en ejecución el plan de pago.
Lo anterior llevó a la compañía a activar, luego del envío una carta al Presidente Gabriel Boric, el mecanismo de resolución de conflictos establecido en Tratados de Libre Comercio (TLC) suscritos por Chile. Esto, bajo el argumento de que el Estado había dañado -por medio de los fallos y otras medidas- la inversión de UHG.
"La decisión de recurrir a este mecanismo se da no solo como resultado del reciente fallo de la Corte Suprema respecto a tablas de factores que ha agudizado la crisis del sector, sino en el marco de diversos hechos que han perjudicado el quehacer de las isapres, así como también a los prestadores de salud del grupo en Chile", indicó el grupo en esa ocasión.
Discrepancias con la industria
La discusión de la Ley Corta activó a los representantes de los gremios, que se agruparon para defender sus intereses. Así, tanto la Asociación de Isapres como Clínicas de Chile (de los prestadores de salud privados) elaboraron estrategias para intervenir e influir en el debate.
UHG no es parte de ninguna de las entidades. Y de la Asociación de Isapres salió a fines del año pasado, debido a discrepancias en torno a lo que se estaba planteando en la discusión.
"La decisión responde a la necesidad de fortalecer de manera enérgica desde nuestras isapres que la solución planteada por el Gobierno y que hoy se discute en el Senado en ningún caso logra recomponer el déficit que se genera a partir del 1 de enero producto de la aplicación del fallo GES, considerando la realidad de los distintos actores", señalaron en esa ocasión.
En concreto, los representantes de UHG no se sintieron conformes con el adelanto de la recaudación del Indicador de Costos de la Salud (ICSA) de junio a abril, que se estaba planteando como solución para contrarrestar la caída de 12% en los ingresos por la aplicación del fallo GES. Y es que a su juicio la medida no era suficiente.
Deuda de Fonasa
UHG tiene otro conflicto con el Estado, ligado a su red de clínicas. Y es que el conglomerado presentó el año pasado demandas civiles de cobro en contra del Fondo Nacional de Salud (Fonasa) y de los Servicios de Salud Metropolitano Norte y Metropolitano Sur Oriente.
Según acusan, le deben alrededor de US$24 millones por la Ley de Urgencias y de rebase.
"Estas acciones legales son el último recurso disponible luego de haber agotado todas las instancias previas en busca de una solución, entre ellas, el envío de más de 40 cartas formales y varias solicitudes de reuniones a la autoridad correspondiente, reclamaciones que no tuvieron acogida satisfactoria", señalaron las clínicas de Red Dávila en ese momento.
El escenario exterior
Fuera de Chile, UnitedHealth Group (UHG) también enfrenta situaciones complejas. En Estados Unidos estaría siendo investigada, según la prensa norteamericana, por posibles faltas a la libre competencia.
En Colombia, en tanto, la industria de la Salud ha tambaleado debido a las severas reformas que ha buscado implementar el Presidente Gustavo Petro.
Los inversionistas, además, no vieron con buenos ojos la intervención que el Gobierno hizo a la segunda mayor "isapre" de ese país, en abril de este año.
