El fin de año se acerca y, con él, la tradición del aguinaldo de Navidad se convierte en un tema prioritario para las empresas, incluidas las pequeñas y medianas (pymes). Para muchos empleados, este bono significa un alivio financiero en un período marcado por los gastos adicionales, mientras que para los emprendedores, se trata de un desafío de planificación financiera y administrativa que puede impactar el flujo de caja de manera crítica.
Sin embargo, la entrega de aguinaldos no es solo una obligación legal en muchas jurisdicciones, sino también una oportunidad para fortalecer la relación con el equipo y fomentar la motivación. Este bono es un reconocimiento y un incentivo que, cuando se gestiona adecuadamente, contribuye al bienestar de los trabajadores, promoviendo una cultura laboral positiva. En este sentido, la preparación para el aguinaldo va más allá del cumplimiento legal: es una inversión en capital humano que beneficia la cohesión y el compromiso dentro de la empresa.
Desde la fintech Xepelin -plataforma digital de servicios financieros para empresas-, indican que “si bien no es un beneficio que deban otorgar las empresas chilenas de manera obligatoria, entregar alguna especie de aguinaldo navideño puede ser una buena oportunidad para impulsar la retención de empleados de tu negocio y crear una relación más sólida con ellos, por lo que se trata de una práctica común”.
Además, explica que pagar este bono solo suele ser una práctica obligatoria en el sector público, esto de acuerdo con lo que establece la Ley 21405, mientras que suele ser opcional en el sector privado. A pesar de ello, también se convierte en algo obligatorio cuando esto queda estipulado en un contrato o convenio de trabajo particular.
En el contexto económico actual, marcado por restricciones financieras y desafíos de liquidez, muchas pymes deben planificar cuidadosamente para poder cubrir este gasto sin afectar su flujo de caja.
“Hasta un 37% de las pymes en Chile han tenido que solicitar créditos con condiciones más restrictivas, lo que refleja la dificultad de cumplir con el aguinaldo sin afectar otros aspectos financieros".
Jaime Sepúlveda, CEO de Skualo
Los desafíos de las pymes para entregar el aguinaldo
Este año, las pymes enfrentan desafíos importantes debido a la falta de liquidez y el aumento de las restricciones crediticias. La incertidumbre económica ha llevado a muchas empresas a tener que tomar decisiones financieras difíciles, priorizando ciertos gastos y evaluando opciones para poder cumplir con sus obligaciones sin afectar la operación diaria del negocio. Sepúlveda destaca que “la planificación anticipada es fundamental para evitar imprevistos que puedan poner en riesgo el cumplimiento del aguinaldo”.
Entre las dificultades, se encuentra también la presión que ejerce la competencia por retener talento. La entrega del aguinaldo es vista por los empleados como un gesto de reconocimiento que ayuda a fortalecer la relación con la empresa. No cumplir con esta expectativa puede llevar a problemas de motivación y retención, un riesgo considerable para las pymes que dependen de su equipo para mantener una operación estable y competitiva.
Alternativas para las pymes en caso de falta de liquidez
En caso de que las pymes no puedan reunir el monto necesario para el aguinaldo, existen opciones que pueden servir como alternativas y que son valoradas por los empleados. Sepúlveda sugiere algunas de las alternativas más comunes, como ofrecer días libres adicionales, tarjetas de regalo o actividades de integración. Estas opciones permiten que los emprendedores continúen mostrando un gesto de gratitud hacia sus empleados, aunque no sea en efectivo.
No obstante, Sepúlveda también advierte que la falta del aguinaldo en efectivo puede afectar negativamente la moral de los trabajadores. “El aguinaldo es percibido como un reconocimiento por el esfuerzo anual, y la falta de este beneficio puede impactar la motivación y la retención de talento”, el CEO de Skualo. Por ello, las empresas deben evaluar detenidamente su situación financiera y optar por la mejor solución que minimice este impacto.
El aguinaldo navideño además de cumplir con una ayuda financiera, también es un gesto de reconocimiento que fortalece el vínculo entre la empresa y sus empleados. Según Sepúlveda, “las pymes que entregan aguinaldo no solo retienen talento, sino que también promueven un ambiente de trabajo positivo y colaborativo”. Además, señaló que contar con empleados motivados y comprometidos es fundamental, ya que la estabilidad y cohesión de su equipo puede ser un factor determinante para su éxito. La entrega del aguinaldo, incluso si implica ciertas limitaciones financieras, es una inversión en el capital humano que puede traer beneficios a largo plazo para la empresa.
Recomendaciones financieras para proteger el flujo de caja
Desde Xepelin sugieren varias estrategias para que las pymes puedan entregar el aguinaldo sin comprometer su flujo de caja:
Planificar con anticipación: Considerar el aguinaldo dentro del presupuesto anual desde el inicio, para evitar retrasos y pagos apresurados.
Optar por financiamiento a corto plazo: Usar herramientas como el factoring (adelanto de cobro de facturas) o el confirming (financiamiento de facturas de proveedores) puede ayudar a mantener la liquidez de la empresa sin afectar su estabilidad.
Crear proyecciones de demanda precisas: Realizar proyecciones para prever los ingresos y gastos de fin de año, especialmente en las fechas de pago de aguinaldos, evitando así sorpresas que puedan impactar el flujo de caja.
Establecer un fondo de emergencia: Contar con un fondo de reserva que permita cubrir el aguinaldo en caso de imprevistos, evitando así afectar el presupuesto operativo.