Un año y siete meses después de su separación,
la cantante Adele y Simon Konecki finalizaron su proceso de divorcio. Según documentos legales a los que tuvo acceso AP,
la pareja acordó compartir la custodia legal y física de Angelo, su hijo de 8 años, y además
ambos renunciaron al derecho de buscar manutención conyugal.
"
Están comprometidos a criar juntos a su hijo con amor. Como siempre,
piden privacidad. No habrá más comentarios", afirmaron sus representantes a la agencia de noticias en un comunicado.
De acuerdo a los documentos, Adele (32) y Konecki (46)
utilizaron la mediación para llegar de manera amistosa a los términos de la separación. Asimismo, señalan que
cualquier problema se intentará resolver sin litigio.
La artista mantuvo su nombre original, Adele Adkins, durante su matrimonio.
La ahora ex pareja se casó oficialmente en mayo de 2018, pero llevaban juntos desde mucho tiempo antes.
Adele y Konecki
argumentaron diferencias irreconciliables como la razón de su separación.
En febrero pasado se conoció que una
cláusula en el acuerdo de divorcio impide a la artista crear canciones sobre su relación con Konecki, con el objetivo de proteger a su hijo.
"Ambos saben que su hijo Angelo debe ser protegido por eso Adele aceptó no cantar sobre su relación", señaló a The Sun una fuente cercana a la artista.
"Es una muestra de respeto", agregó.
Durante los últimos meses
, la cantante ha sido relacionada sentimentalmente con el rapero Skepta (38). Frecuentan los mismos círculos en Londres y
ella se está divirtiendo", sostuvo una fuente a People en octubre pasado.