China tomó medidas drásticas este jueves para intentar frenar el avance del coronavirus, que comienza a propagarse por el mundo, y puso en cuarentena a la metrópolis de Wuhan y a otra ciudad cercana, al mismo tiempo que anuló las ceremonias del Año Nuevo en Beijing para reducir los riesgos de contagio.
Desde las 10:00 horas (23:00 horas del miércoles en Chile), ningún tren ni avión podía salir de Wuhan, una urbe de 11 millones de habitantes situada en pleno centro de China. Los peajes en las autopistas estaban cerrados.
La ciudad, a orillas del río Yangtsé,
es el epicentro de la epidemia, que desde diciembre
ha contaminado a más de 570 personas y causado 17 muertes, según el último balance comunicado el miércoles por la noche. Todas las personas fallecieron en Wuhan o en su región.
"Los habitantes no tienen que abandonar Wuhan sin ninguna razón específica", anunció el servicio municipal a cargo de la lucha contra la epidemia, que explicó que esta medida fue tomada para "frenar de forma eficaz la propagación del virus.
En tanto, a 70 kilómetros al este, Huanggang, una ciudad de 7,5 millones de habitantes, se encontraba este jueves bajo medidas similares. La circulación de los trenes fue interrumpida hasta nuevo orden y las autoridades suspendieron todo el transporte público a partir de la medianoche (13:00 horas en Chile).
Desde esa ciudad, el llamado a los ciudadanos es de no salir de la urbe sin "razones especiales".
A una distancia similar de Wuhan, la ciudad de Ezhou (1,1 millones de habitantes), ya había cerrado su estación de trenes a partir de las 11:20 horas (00:20 en Chile) con el fin de "cortar de manera efectiva los canales de propagación del virus".
Suspensión de las ceremonias
Por su parte, la alcaldía de Beijing anunció este jueves la anulación de las populares ceremonias previstas en la ciudad para el Año Nuevo. Cada año, centenares de miles de personas acuden a los parques y espacios públicos para asistir a los tradicionales bailes del león y del dragón.
China está a punto de iniciar este viernes las vacaciones del Año Nuevo lunar, un periodo en el que cientos de millones de personas viajan en el territorio o al extranjero, lo que mantiene en alerta a las autoridades.
El virus fue detectado en un mercado de abastos en Wuhan. Aunque el mercado, ahora cerrado, es principalmente de pescado, las autoridades reconocieron que se vendían animales salvajes de forma ilegal.
Todavía se desconoce su origen exacto pero su periodo de incubación sería de unos 14 días.
La cepa es
un nuevo tipo de coronavirus, una familia que cuenta con una amplia gama de virus que pueden provocar enfermedades benignas en el hombre como el catarro, pero otras más graves como el SRAS.
Durante la epidemia del SRAS, que mató a unas 650 personas en 2002-2003 en China, incluyendo Hong Kong, la OMS criticó duramente al gobierno chino por haber tardado en dar la alerta y haber querido disimular la envergadura de la epidemia.