El coronavirus se registró por primera vez en Uruguay el pasado viernes 13 de marzo, con dos casos confirmados, pero la acotada cifra cambió rotundamente el martes cuando un reporte de la presidencia de la República entregado en la noche anunció que en el país ya hay 50 personas infectadas.
A pesar de que el Gobierno de Luis Lacalle Pou ha anunciado medidas restrictivas como el cierre de shoppings, la suspensión de clases, el teletrabajo para los empleados del sector público y el cierre de la frontera con Argentina, de un día para otro la cifra de contagios dentro de Uruguay pasó de 29 a 50, lo que ha causado gran alarma en el país que tiene apenas tiene tres millones y medio de habitantes.
Hasta el viernes 13 de marzo pasado, Uruguay - junto con Venezuela- era el único país en Sudamérica en el que no había llegado el Covid-19, entonces, ¿cuáles fueron las razones que llevaron a la nación a tener un explosivo aumento de casos los últimos días?
Un caso en un matrimonio de 500 personas
Según reportó TN, el subsecretario de Salud Pública, José Luis Satdjian, detalló que de los "29 casos que se tenían el lunes, 20 están relacionados a una de las personas con coronavirus, quiere decir que está identificado el núcleo o grupo donde se está desarrollando la enfermedad".
Este caso que pudo haber sido el causante de otros 20, y que hizo que la cifra diera un salto exponencial de un día a otro. Se trata de una diseñadora de modas que viajó a Europa y que a su vuelta a Uruguay asistió a un matrimonio con 500 personas, y que poco después le informaron que estaba infectada con covid-19.
Carmela Hontou (57), fue la mujer que contrajo coronavirus y asistió al evento en Carrasco. La diseñadora ha sido fuertemente criticada por los ciudadanos uruguayos y a través de las redes sociales debido a que la apuntan como la portadora que ingresó el virus al país y que "irresponsablemente" lo esparció en un evento social.
La empresaria realizó dos viajes a Europa entre enero y marzo, detalló a Infobae en una entrevista. En enero, Hontou viajó a Milán y Madrid para asistir a unas reuniones debido a su profesión. En ese momento fue cuando la diseñadora sintió por primera vez síntomas extraños. "Estuve el 21 de enero en Milán y el 24 llegué a Madrid. Desde el 25 volé de fiebre, estuve tres días a 41" grados, expresó la empresaria.
"No podía ni hablar. Tenía 41 grados de fiebre y un edema de glotis. Pensé que era una fiebre por el cambio de clima, por el frío. Llamé a Uruguay pidiendo que me mandaran un médico de mi seguro de viaje. El médico estuvo cuatro horas para sacarme de la crisis respiratoria", agregó.
Respecto a este episodio, es que la mujer recuerda que tuvo sus primeras dudas sobre el coronavirus, pero en ese momento en España todavía no había casos registrados.
En el segundo viaje, la diseñadora se mantuvo en Madrid porque en ese momento Milán vivía sus días más críticos por el Covid-19. Tras unos días en el país ibérico, Hontou volvió a Carrasco, Uruguay, en donde no le habrían realizado ningún control a su llegada, sostuvo.
El día después de asistir al matrimonio, la diseñadora empezó a sentirse mal por lo que se realizó el test que dio positivo. "Yo sospecho que me lo agarré (el covid-19) en enero (…) Yo lo pasé por arriba al virus, y lo que tuve después fue una recaída porque estaba flotando (el virus) en Madrid, agarré la cola. Me lo dijo el infectólogo, cree que no estoy ya en fase de contagio, ya pasó. Dice que tengo el virus metido y por eso me salió positivo, pero que no estoy ya para contagiar a nadie", insistió la mujer, que manifestó que es poco probable que las 20 personas que se contagiaron en el matrimonio lo hayan hecho por ella.
Capacidad de diagnóstico limitada
Adicionalmente a este caso de contagio masivo, en Uruguay se han enfrentado a una capacidad limitada en los laboratorios.
Tal y como reportó el diario uruguayo El Observador, el Gobierno está lejos de replicar casos exitosos al combate de la epidemia como Corea del Sur. En el país asiático de 51,5 millones de habitantes se llevan a cabo 10 mil test de laboratorio diarios para detectar la enfermedad, informó la BBC.
Si Uruguay quisiera llegar a la altura de Corea del Sur, proporcionalmente hablando, tendría que realizar 588 pruebas al día, situación que dista mucho de la realidad.
El laboratorio del Ministerio de Salud Pública durante los últimos días solo ha analizado 20 casos en promedio.
Según la experiencia internacional en la lucha contra la epidemia, los test son "fundamentales" para corroborar la expansión de la enfermedad. Ya que mientras más pruebas se hacen, más casos sospechosos se pueden confirmar y más personas en contacto con los casos se pueden aislar.
Pero el número de exámenes va de la mano de la cantidad de kits que tiene el Gobierno. Al asumir la nueva administración, esta solo contaba con 100 kits, por lo que el ministro Daniel Salinas encargó 300 más. Luego se encargaron otros 2.000, que arribaron recién este lunes. Y la semana pasada se encargaron 20 mil más para reforzar al país en medio de la epidemia.
"En un sistema como el nuestro, con una capacidad laboratorial limitada, no sería el momento de diagnosticar a la mayor gente posible porque no se puede. Si se sigue una visión realista, solo podemos diagnosticar al sintomático que viene del exterior y al sintomático local que uno asume que puede tener el virus", manifestó a El Observador el infectólogo Eduardo Savio.