El Brexit permitió al Reino Unido acelerar su aprobación de una vacuna contra el covid-19, cuya autorización debe aún esperar en la Unión Europea, afirmó el miércoles el gobierno británico, aunque su regulador independiente no está totalmente de acuerdo.
"Mientras que hasta principios de este año estábamos en la Agencia Europea de Medicamentos (EMA), gracias al Brexit hemos sido capaces de tomar una decisión (para autorizar la vacuna de Pfizer/BioNTech) mediante el organismo regulador británico", aseguró el ministro de Salud, Matt Hancock, a Times Radio.
Como consecuencia de su salida de la UE el 31 de enero, el Reino Unido pudo "no ir al ritmo de los europeos, que se mueven un poco más despacio", agregó.
Tras la salida británica del bloque, la EMA, que tenía sede en Londres, tuvo que trasladarse a Ámsterdam.
Pero el Reino Unido se encuentra actualmente en un período de transición posbrexit hasta el 31 de diciembre y por ahora todavía se aplican las regulaciones farmacéuticas de la UE.
Tras dar luz verde en tiempo récord a la utilización de la vacuna Pfizer/BioNTech, la Agencia Reguladora de Medicamentos y Productos Sanitarios británica (MHRA) explicó que lo pudo hacer "utilizando disposiciones que existen bajo la legislación europea hasta el 1 de enero".
"Nuestra velocidad (...) ha dependido totalmente de los datos disponibles de nuestra revisión continua", subrayó June Raine, directora de la MHRA, insistiendo en que la agencia no tomó ningún atajo para aprobar la vacuna.
El martes, la EMA anunció que celebraría una reunión extraordinaria el 29 de diciembre "a más tardar" para considerar su propia aprobación de la vacuna desarrollada por el laboratorio alemán BioNTech y el gigante estadounidense Pfizer.
Otra compañía estadounidense,
Moderna, afirmó que solicitará el lunes la autorización de su vacuna en Estados Unidos y Europa.
A menos de un mes del fin del periodo de transición posbrexit, Londres y Bruselas se encuentran aún enzarzados en difíciles negociaciones en busca de un acuerdo comercial que rija sus futuras relaciones a partir del 1 de enero.
Si no lo logran, el comercio entre ambas orillas del canal de la Mancha se verá seriamente afectado.
Pero Hancock aseguró que tiene listos aviones para utilizar en lugar de barcos, si hay perturbaciones en los puertos británicos, para transportar las dosis de la vacuna de Pfizer/BioNTech al Reino Unido desde su laboratorio de fabricación en Bélgica.