El cura Óscar Muñoz en la sala del Juzgado de Garantía de Rancagua.
Aton
SANTIAGO.- Esta mañana, el
Juzgado de Garantía de Rancagua fijó la medida cautelar de prisión preventiva para el ex canciller del Arzobispado de Santiago, el sacerdote
Óscar Muñoz Toledo (56), acusado por los delitos de abusos sexuales reiterados a menores y estupro.
Además, el tribunal dio a la fiscalía un plazo de 180 días para la investigación en contra del presbítero.
Ayer el OS-9 de Carabineros concretó su detención, luego de allanar el Arzobispado de Santiago, donde se habrían recopilado más antecedentes respecto al caso.
Según precisaron desde la fiscalía, son al menos cinco las presuntas víctimas de Muñoz, abusos que supuestamente ocurrieron en Santiago y Rancagua desde 2012 hasta marzo de este año.
El organismo persecutor también señaló que todos los delitos por los que fue formalizado el sacerdote se encuentran plenamente vigentes para la persecución penal, además de que no se descarta la existencia de más víctimas.
Muñoz, en rol de canciller del Arzobispado, fue una de los encargados de tomar denuncias de personas presuntamente abusadas. En enero de este año, el prelado se auto denunció por abusos -dos semanas antes de la visita del Papa Francisco a Chile-, ante la Oficina Pastoral de Denuncias, por lo que fue suspendido de sus ejercicios ministeriales.
Los antecedentes de su caso fueron remitidos a la Congregación para la Doctrina de la Fe -en la Santa Sede-, para ser juzgado canónicamente. Proceso que se está realizando en forma paralela al que ahora está llevando adelante la justicia civil.
