Nuevos antecedentes han surgido durante la tarde de este domingo con respecto a la muerte de dos de las 11 personas que resultaron intoxicadas en una casa de veraneo en Laguna Verde y que, según informaron inicialmente los seremis Rosa Oyarce (RM) y Francisco Álvarez (Valparaíso), sería atribuible a una mala manipulación de alimentos.
Las dudas aparecieron luego que el subprefecto Erick Martínez, de la Brigada de Homicidios de la PDI de Valparaíso, señalara que entre las diligencias que han realizado esta semana se registraron dos concurrencias al SAMU de Laguna Verde, "donde se comprobó el fallecimiento de dos personas que pertenecían a la congregación Siervos de la Caridad".
"Las causas de muerte que ha entregado el SML no están asociadas a procesos de intoxicación", sostuvo Martínez. Detallando que "tuvimos concurrencias como brigada de homicidios se desarrolló el día 14 de enero y otra el día 16 de enero, "y ambas muertes están asociadas a otras patologías como causa basal, y por el momento no tenemos un antecedente concreto que nos haga presumir que ambos decesos están relacionado con una intoxicación". En ese sentido, especificó que "existe un rango de diferencia de 48 horas y me parece que la intoxicación es posterior".
Según la información entregada por Martínez, una de las personas falleció por un paro cardíaco, mientras que la otra habría sido víctima de una hemorragia digestiva baja. Sin embargo, enfatizó en que "tenemos que estar a la espera de los resultados exámenes toxicológicos y estomatológicos, que permitan establecer si existe alguna correlación entre la causa de muerte y algún proceso anterior que diga relación con lo que se manifiesta".
Además, sostuvo que la PDI está trabajando en coordinación con la seremi de Salud de Valparaíso para recabar más antecedentes, y mañana lunes "los detectives se van a constituir en el lugar a fin de recabar todos los antecedentes que dicen relación con el sumario sanitario y poder la correlación entre los hechos y llegar a una conclusión investigativa definitiva".
Entre las características de los fallecidos, son pacientes de sexo masculino entre 50 y 55 años, y presentan alguna patología neurológica de base. "No tenían ningún otro problema más que la patología", sostuvo el subprefecto de la PDI.
Rosa Oyarce: Deshidratación "llega a un estado que produce paro cardíaco"
En conversación con Emol, la seremi de Salud Metropolitana Rosa Oyarce fue consultada por los nuevos antecedentes dados a conocer por la PDI, respondiendo que "no tenemos antecedentes de eso, y como lo tomó la Fiscalía no vamos a entrar en ese detalle, pero estas personas se encontraban mal desde hace varios días, pero esto al parecer es problema de manipulación de alimentos desde hace varios días".
Sobre la situación del primer fallecido, quien habría sufrido un paro cardíaco, Oyarce sostuvo que "sí, hay que pensar que si estaban con intoxicación y diarrea violenta, esto indica que estas personas estaban deshidratadas, y es probable que haya sido por la deshidratación que estaba sufriendo y el efecto de la toxina que genera una diarrea profusa (...) y produce lesiones al interior del colon, pero eso va a ser materia de investigación que se realice".
Con todo, la autoridad sanitaria sostuvo que es posible que se genere un paro cardíaco producto de una deshidratación, "efectivamente, por eso nosotros nos preocupamos tanto de la intoxicación alimentaria (...) dado que llega a un estado que produce paro cardíaco por la deshidratación o el estado que provoca esta enfermedad".
Dos personas serían dadas de alta este lunes
En un nuevo balance de la situación, la seremi de Salud reiteró que seis de las ocho personas que se encontraban en el Hospital San José fueron dadas de alta durante ayer en la tarde, mientras que dos quedan en el lugar "y probablemente mañana sean dada de altas, están bien, fuera de peligro". En tanto, una tercera persona se encuentra en estado de gravedad en el Hospital Carlos Van Buren de Valparaíso, "pero se encuentra fuera de peligro", sostuvo Oyarce.
Consultada por el antecedente exacto que manejan respecto a lo que consumieron las personas, que posiblemente sería una cazuela de pollo, Oyarce sostuvo que "eso no lo sabemos, por lo menos mi teoría es que es un problema de manipulación de alimentos. Esta es una bacteria que se encuentra en el intestino tanto en animales como en las personas (...) posiblemente, las manos que lo manipularon no estaban en buenas condiciones, el lugar era insalubre, etc.", indicó.
