SANTIAGO.- En el marco de su participación en el Encuentro Nacional de la Empresa (Enade), el Presidente Sebastián Piñera se refirió a la crisis social que afecta al país desde el pasado 18 de octubre y los procesos que han surgido a partir del estallido. Ocasión en que señaló que desde hace tiempo en Chile, "la Constitución no es ese gran marco de unidad, sino el centro de la polémica".
En su intervención ante los empresarios, el Mandatario abordó el acuerdo por una nueva Constitución y las implicancias de aquello, afirmando que "la Constitución en los países civilizados, es el gran marco de unidad, de estabilidad, de proyección que permite a los países procesar sus diferencias y darles certeza y estabilidad a los caminos del futuro. En nuestro país, hace mucho tiempo que la Constitución no es ese gran marco de unidad, sino que es el centro de la polémica".
"Por eso, el acuerdo alcanzado por un conjunto de partidos políticos, apunta precisamente a eso, a buscar un acuerdo que nos permita que la Constitución tenga ese apoyo amplio y sólido, que le dé esa estabilidad y legitimidad que le permita jugar ese rol que es tan importante en las naciones", explicó.
En ese contexto, el jefe de Estado recordó que el acuerdo por una nueva Constitución firmado por un grupo transversal de partidos políticos, plantea dos caminos, "igualmente legítimos y democráticos para perfeccionar nuestra Constitución. El primero, a través de una Convención Constituyente, Mixta o plenamente elegida, el segundo, a través de la institucionalidad vigente".
Con ello, recordó que será el próximo 26 de abril cuando los chilenos elijan, asegurando de paso que "el Gobierno dará total garantías a todas las partes, fomentará la participación de nuestros ciudadanos y velará para que todos ellos se puedan pronunciar libre y pacíficamente".
Importancia de los contenidos
Sin embargo, el Presidente reiteró una advertencia, señalando que hasta ahora la discusión "se ha centrado solamente, exclusivamente o mayoritariamente en los procedimientos, en los métodos y no hemos discutido el fondo. Y tal como lo dijo Claudio (Muñoz, presidente de Icare), yo creo que es útil iniciar una conversación y buscar acuerdos respecto de qué queremos que sean los principios y los contenidos básicos que estén en nuestra Constitución".
A su juicio, "eso va a dar estabilidad y va a dar certeza, en un proceso que por su naturaleza si se decide el camino de una Convención Constituyente va a tomar mucho tiempo", agregando que en una nueva Carta Magna deberían estar principios como la libertad, la democracia y el Estado de Derecho, la separación, independencia y transparencia de los poderes del Estado, el valor de la vida y de la familia, la igualdad de derechos entre hombres y mujeres, el derecho a la salud, educación, entre otros.
"Si de verdad queremos tener una Constitución legítima y respetada por todos y lograr que sea es gran marco de unidad, estabilidad, de certeza, tenemos que empezar por respetar la Constitución que tenemos. Y muy especialmente, aquellos que al asumir sus cargos juraron respetarla y cumplirla y que no están cumpliendo con ese compromiso", apuntó.
"La soledad del poder"
Además, Piñera relató algunos momentos claves en que le tocó tomar decisiones en lo que va de esta crisis, reconociendo de paso que en "estos últimos 3 meses han sido los meses más difíciles en los casi 6 años que he ejercido la presidencia y en los más de 30 años que he dedicado al servicio público".
Así, compartió algunos sentimientos personales sobre lo que él mismo denominó como "la soledad del poder". "En esos momentos estelares es cuando la Presidencia se siente y es una responsabilidad que pesa y es cuando se ejerce en solitario", precisó.
De este modo, afirmó que el pasado 12 de noviembre, día en que se vivió una nueva ola de violencia, llegó un momento en que reflexionó solo con su conciencia y "experimenté lo que se llama la responsabilidad del poder y la soledad del poder".
"Después de analizar las opciones (también de convocar a los militares) decidí que íbamos a seguir el camino darle una nueva oportunidad al diálogo, los acuerdos y a la paz (...) Sabíamos que esta opción no detendría inmediatamente la violencia, pero tenía la más profunda convicción que era la alternativa correcta, la mejor alternativa para avanzar hacia una paz verdadera que tanto necesita nuestro país", sostuvo.
Tras esto, el Presidente recordó que propuso acuerdo por la paz, por la justicia social y por una nueva Constitución. "Yo sé que esa noche muchos no comprendieron ni compartieron esa decisión", dijo, pero aludió a que dos días después surgió el acuerdo constitucional.
Pese a que cree que la violencia ha ido retrocediendo, el Mandatario precisó que "necesitamos un acuerdo nacional contra la violencia, porque no basta con quererlo o decirlo, tenemos que unirnos con fortaleza, y sin ninguna ambigüedad, para condenar todo tipo de violencia, aplicar todo el rigor de la ley a todo tipo de violentista, y también desenmascarar a todos aquellos que en el fondo la promueven o la legitiman".