SANTIAGO.- En el nuevo balance que entregó este miércoles el Ministerio de Salud respecto a las personas contagiadas de coronavirus en el país, se indicó que éstas subieron hasta 1.142 y que hay tres personas fallecidas.
Ante el avance progresivo de la enfermedad es que las autoridades han tomado una serie de medidas para afrontar la eventual demanda de hospitalizados. En el sector público, por ejemplo, el plan fue adicionar cuatro mil camas a la red, 1.300 de ellas críticas.
Pero si bien los Servicios de Salud tomarán el "control" de los recintos asistenciales privados, algunos ya vienen tomando medidas desde hace semanas, considerando que el peak de contagiados se espera para fines de abril.
Un ejemplo es lo que ocurre en el Hospital Clínico de la U. de Chile. A través de un video de circulación interna, la directora general Graciela Rojas comentó a los funcionarios que "la pandemia nos ha impuesto cambios drásticos de conducta: distanciamiento social, cuarentena preventiva y medidas exigentes de aislamiento. En una semana también hemos tenido que reorganizar nuestro hospital, suspendido actividades clínicas y cerrado servicios. Hemos ampliado nuestro servicio de emergencia, que hoy ofrece 31 box de atención con una sección separada para recibir personas con síntomas respiratorios".
"Hemos debido suspender toda la atención a niños en la urgencia, transformado camas para poner a disposición de nuestros usuarios un mayor número de camas de cuidados intensivos. Nuestro laboratorio ha analizado a la fecha cerca de 200 test para detectar casos. De estos, alrededor del 10% han resultado positivos y han sido enviados a sus casas a aislamiento y cuidados domiciliarios", añadió.
Junto con asegurar que "hacemos todos los esfuerzos por cuidar a todos los miembros de nuestra comunidad", aseguró que habrá un programa de apoyo emocional para los funcionarios.
En tanto, en clínica Indisa "están optimizando a su personal, mandando a casa a algunos grupos para tener 'reservas' de médicos y otros trabajadores de la salud por si hubiese algún grupo que se contagie", señala el director médico de ese centro,
Rodrigo Castillo.
Además, "tienen un plan de contingencia para pacientes con 75 camas adicionales y todas para pacientes que requieran ventilación y en un escenario crítico, podrían aumentar al doble esa capacidad de camas, pero sin respiradores, ya que no hay más que 75".
Por su parte, en Clínica Santa María "habilitamos un espacio absolutamente aislado del resto de las áreas de la Clínica, para todo paciente que consulte por sintomatología respiratoria de urgencia. El objetivo es proteger a todos nuestros pacientes y colaboradores, así como abordar con todas las medidas de protección disponibles a los casos sospechosos".
También suspendieron "de forma programada y progresiva, toda atención ambulatoria, manteniendo sólo las atenciones que requieren una evaluación presencial".
En Clínica Dávila modificaron "la circulación dentro de la clínica, para separar a aquellos que consultan por enfermedades respiratorias y/o con sospecha de Covid-19, de personas que, por otros motivos, se vean en la obligación de recibir una atención de salud".
Por último, desde Clínica Vespucio sostienen que también se suspendió la atención ambulatoria y "toda actividad hospitaliaria diferible". "Para dar solución a las consultas de los pacientes que requieran continuidad en su atención y que no necesiten de evaluación presencial, habilitaremos sistemas de comunicación remota con distintos profesionales de la salud". Además, pusieron restricción de visitas a pacientes.
Sector público
El director (s) del Servicio de Salud Viña del Mar - Quillota, Alfredo Molina, cuenta que "estamos trabajando arduamente para poder hacer entrega adelantada del Hospital Gustavo Fricke, en la habilitación de los pisos 6 y 7, más imagenología y hoy en día, dada la contingencia y principalmente por esta alerta sanitaria, estamos haciendo el mayor de los esfuerzos para poder habilitar inclusive un mayor número de camas, esperamos llegar a eso de las 400 adicionales".
En el resto de la red, afirma que están tratando de "complejizar camas, principalmente en cada uno de los hospitales y de esa manera prepararnos de mejor forma para poder enfrentar esta pandemia".
En la Región del Maule "se han postergado todas las cirugías electivas, ambulatorias, electivas no indispensables, lo que nos ha permitido incrementar el número de camas disponibles en nuestros establecimientos. En los 13 hospitales del Maule tenemos 1.725 camas disponibles y para ser usadas hoy tenemos 889", indica el director del Servicio de Salud, Luis Jaime.
"Sin embargo, tenemos planificado, a punto de concretar en los próximos días, incrementar más las camas en nuestra red asistencial, en el Hospital Italiano alrededor de 150, internados, con alrededor de 1.000 básicas y hoteles sanitarios en dos ciudades de la región que incrementaría en aproximadamente 200 personas más para aislar a pacientes con coronavirus. Aparte, el incremento de camas de cuidados intensivos, será de unas 100", agrega.
