Desde el
Gobierno salieron a condenar la fiesta clandestina que anoche se realizó en Maipú a la que asistieron cerca de 400 personas, según aseguró carabineros.
Personal policial logró detener al organizador del evento, que se convocó por redes sociales y esta tarde pasará a control de detención. Mientras que los vehículos en los que huyeron quienes participaron de la fiesta fueron identificados.
La vocera de La Moneda,
Karla Rubilar, apuntó a la gravedad de que todas esas personas estuvieran juntas considerando el estado de catástrofe vigente en el país a causa de la pandemia por el coronavirus, donde no se pueden reunir más de 50 personas y tomando medidas de prevención.
Según informó carabineros, en la fiesta se vendía alcohol, no se respetaba la distancia social ni se tomó ninguna medida de seguridad sanitaria.
"No lograremos ganar la batalla contra el Covid-19 si como anoche, más de 400 personas que
se creen invencibles, en pleno toque de queda, van a fiesta clandestina poniendo en riesgo su salud y la de los demás.
¿Qué más tiene que pasar para entender que esto no es un juego?", emplazó la ministra de la Segegob a través de su Twitter.
En tanto el subsecretario de Redes Asistenciales, Arturo Zúñiga, apuntó -en la misma red social- a las consecuencias que eso va a generar. "Es muy difícil enfrentar una pandemia como la que estamos viviendo. Pero se hace aún más cuesta arriba sin responsabilidad ciudadana".
"De esos 400 jóvenes muy pocos serán hospitalizados. Pero pueden provocar que sus padres o abuelos sean conectados a Ventilación y un 10% fallecerá", sentenció la autoridad sanitaria.